Análisis:Cosa de dos

Brujas TV

La alergia al sensacionalismo, al énfasis, a la obviedad, a la teatralidad rancia, al efectismo, al subrayado, a la histeria, que caracteriza a la apasionante socióloga y honesta periodista de investigación Mercedes Milá también se manifiesta en la titulación de sus reportajes sobre las miserias de este mundo. En Diario de... los temas van encabezados por 'Los vicios del concejal', 'Caza de menores en la Red', 'Pillado in fraganti', 'Mujeres adictas', 'Una doble vida' y sutilezas de este tipo.

En uno de ellos, la vocación policial de dama tan concienciada intenta atrapar a un ped...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La alergia al sensacionalismo, al énfasis, a la obviedad, a la teatralidad rancia, al efectismo, al subrayado, a la histeria, que caracteriza a la apasionante socióloga y honesta periodista de investigación Mercedes Milá también se manifiesta en la titulación de sus reportajes sobre las miserias de este mundo. En Diario de... los temas van encabezados por 'Los vicios del concejal', 'Caza de menores en la Red', 'Pillado in fraganti', 'Mujeres adictas', 'Una doble vida' y sutilezas de este tipo.

En uno de ellos, la vocación policial de dama tan concienciada intenta atrapar a un pederasta utilizando como cebo a una redactora del programa que se hace pasar por una Lolita de 13 años. La última cita con el infame menorero la establecen en un parque. Éste y su presunta presa hablan del color de los pezones, de la posibilidad de un beso y de lo que sea menester después. Pero la Milá, vestida de soldado de asalto y que está siguiendo con unos sofisticados auriculares (para aclararnos: en plan The wire) las tórridas proposiciones del pervertido a la falsa colegiala, decide cortar la farsa plantándole la cámara al acojonado buscaniñas y gritándole: "Ya se acabó. ¿Cómo se puede ser tan inmoral?". El pavo se abre a toda leche con actitud despavorida. Y encontrando deleznable su afán por andar seduciendo crías, aún me inspira más miedo la militarizada y justiciera Milá que el cazador cazado. Y parecida grima. Irracional que es uno.

Más esperpentos. Escucho esta declaración del profundo y sobrio George Bush sobre la crisis económica de Estados Unidos: "Wall Street se ha emborrachado y ahora tiene resaca. Habrá que ver cuánto tiempo sigue sobrio". Nadie puede negar los antiguos y extenuantes conocimientos de Bush sobre los efectos del alcohol, pero tampoco es justo echarle la culpa de todos los males. Todos sabemos por la sincera boca del inefable Zapatero que aquí no hay crisis, que aquí no se ha emborrachado ni dios. Pero les va a regalar a los angustiados reyes del cemento (¿dónde están sus infinitas ganancias?) 300 millones de euritos. Pensando en los obreros en paro. Como siempre.

Archivado En