Educación aplaza un año la tercera hora en castellano

ERC se planta ante el deseo de Maragall de aplicarla ya

Marcha atrás del Departamento de Educación. La Generalitat retrasará un año la entrada en vigor del decreto del Gobierno central que obliga a impartir a los colegios una tercera hora semanal en castellano, después del plante de Esquerra Republicana.

Educación remitió a finales del pasado mayo una nota a todos los centros para que informaran sobre su programa en materia de lenguas para el próximo curso. Pero ayer Esquerra Republicana dio un puñetazo sobre la mesa y advirtió de que, mientras formara parte del Ejecutivo catalán, el decreto no iba a aplicarse.

Los republicanos acorda...

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Marcha atrás del Departamento de Educación. La Generalitat retrasará un año la entrada en vigor del decreto del Gobierno central que obliga a impartir a los colegios una tercera hora semanal en castellano, después del plante de Esquerra Republicana.

Educación remitió a finales del pasado mayo una nota a todos los centros para que informaran sobre su programa en materia de lenguas para el próximo curso. Pero ayer Esquerra Republicana dio un puñetazo sobre la mesa y advirtió de que, mientras formara parte del Ejecutivo catalán, el decreto no iba a aplicarse.

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Los republicanos acordaron ayer con el presidente de la Generalitat, José Montilla, una moratoria en la aplicación de la norma, de un año, según fuentes de ERC. Para entonces estará aprobada la nueva Ley de Educación de Cataluña, que dejará libertad a las escuelas para que amplíen o no las horas lectivas en o de castellano.

El departamento que dirige el socialista Ernest Maragall envió el 26 de mayo una circular en la que instaba a los centros a que antes del 13 de junio informaran sobre cómo distribuirán entre los tres ciclos de primaria el aumento de 245 horas en lengua española. Si esta materia no pasaba de dos a tres horas semanales, Educación rechazaría el proyecto lingüístico del centro.

Los republicanos se enteraron ayer de la nota y pusieron el grito en el cielo. La portavoz parlamentaria, Anna Simó, proclamó que de ninguna de las maneras se aplicaría el decreto. Los otros dos socios del tripartito, el PSC e Iniciativa, consideraron falsa esta polémica, pues el Gobierno consensuó en julio de 2007 una solución a esta espinoso asunto. Según este compromiso, cada centro escolar tendría libertad de elección.

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Según Esquerra, la urgencia con que Educación ha mandado la circular obecede a las presiones de la plataforma antinacionalista catalana Convivencia Cívica. Este grupo presentó una denuncia ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, que ahora ha requerido a la Generalitat que le informe sobre las horas lectivas que se imparten en catalán, castellano e inglés.

Ante la controvertida disputa, José Montilla terció ayer en el debate y apeló a que las lenguas en la enseñanza no sirvan para dividir, porque son "caminos hacia la libertad". Respecto a la nueva Ley de Educación, recordó a los partidos que deberán renunciar a alguno de sus planteamientos para que la norma salga adelante.

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