El Parlamento será el segundo de Europa con más mujeres
La primera Cámara paritaria es el resultado de las listas 'cremallera'
Andalucía estrenará el 3 de abril un Parlamento paritario por vez primera en su historia. Las listas cremallera, que obligaban por ley a los partidos andaluces a alternar mujeres y hombres en sus candidaturas, han tenido un efecto rotundo: la elección de 50 parlamentarias entre 109 escaños, casi el 46% de la Cámara.
Un porcentaje que coloca al Parlamento andaluz a la vanguardia de Europa en igualdad en las instituciones políticas. Suecia tiene el único parlamento con una cuota de mujeres más alta (el 47%), según el informe ...
Andalucía estrenará el 3 de abril un Parlamento paritario por vez primera en su historia. Las listas cremallera, que obligaban por ley a los partidos andaluces a alternar mujeres y hombres en sus candidaturas, han tenido un efecto rotundo: la elección de 50 parlamentarias entre 109 escaños, casi el 46% de la Cámara.
Un porcentaje que coloca al Parlamento andaluz a la vanguardia de Europa en igualdad en las instituciones políticas. Suecia tiene el único parlamento con una cuota de mujeres más alta (el 47%), según el informe Mujeres y hombres en en el proceso de toma de decisiones elaborado por la Comisión Europea en 2007.
Suecia y Finlandia son los únicos países de la UE con cámaras paritarias
De los 27 estados miembros de la UE sólo Suecia y Finlandia han alcanzado en sus parlamentos nacionales la paridad, que significa que hombres o mujeres tienen una presencia equilibrada que no disminuye del 40% ni supera el 60%. El Congreso español elegido el domingo no se ajustará a esta proporción, ya que las 125 diputadas elegidas representan el 35,7% del hemiciclo. No sólo no será paritario, si no que además retrocede ligeramente respecto a las legislaturas anteriores (36,2% en la pasada y 37,7% entre 2000 y 2004).
¿Por qué las urnas han gestado una Cámara paritaria en Andalucía? No ha sido por arte de magia, aunque la composición del anterior Parlamento ya se acercaba a la paridad. Las 42 mujeres representaban el 38,5% de los escaños.
Pero en las recientes elecciones autonómicas entró en vigor la Ley Electoral de Andalucía que obliga a todos los partidos a presentar listas cremallera, una medida más ambiciosa que la contemplada en la Ley estatal de Igualdad, que sólo obliga a respetar la proporción del 40%-60% entre mujeres y hombres.
La ley andaluza ha sido recurrida por el Partido Popular ante el Tribunal Constitucional, al considerar, entre otras razones, "extremadamente dudoso que un determinado género parta de una situación de postergación". Aunque todavía no se ha pronunciado sobre este recurso, el Constitucional ya ha tumbado el que presentó el PP contra la Ley de Igualdad estatal que se asentaba sobre los mismos argumentos jurídicos, lo que permite aventurar que el resultado del andaluz podría correr similar suerte.
La Ley Electoral andaluza fue recurrida por 62 diputados del grupo Popular en el Congreso en septiembre de 2005, entre los que figuraban 14 diputadas. Tras la reciente decisión del Constitucional sobre la ley estatal, el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, dejó entrever que deseaba retirar la iniciativa contra la norma andaluza. Pero seguirá adelante porque jurídicamente no puede dar marcha atrás.
La paridad en la Cámara autonómica refuerza la igualdad en las instituciones políticas de Andalucía, que también fue la primera comunidad en tener un Gobierno paritario en 2000. El presidente andaluz, Manuel Chaves, dio un paso más allá en la anterior legislatura al designar un Gobierno con más mujeres que hombres.
La igualdad como uno de los ejes de la acción política ha sido consagrada en la reforma del Estatuto de Andalucía. Su entrada en vigor se ha traducido en un equilibrio entre géneros en los cargos públicos, no siempre bien recibidos por todos los partidos como se observó durante el proceso para elegir a los cuatro adjuntos del Defensor del Pueblo, que forzosamente tenían que ser dos mujeres y dos hombres.
La Cámara será paritaria, pero el grupo parlamentario de Izquierda Unida, no. Los seis diputados que han logrado escaño encabezaban sus respectivas provincias. Sólo una de las candidaturas de IU al Parlamento andaluz estaba presidida por una mujer: Almería, donde no sacaron acta. Dado que la federación no obtuvo más de un representante en seis provincias -lo que habría abierto el camino a una diputada que obligatariamente iba de número dos-, el resultado es un grupo cuya composición se sitúa en las antípodas de la paridad.
Sorprende, además, cuando en la legislatura anterior fue uno de los tres grupos que contó con una portavoz (Concha Caballero) y cuando su discurso político incluye una clara defensa de la igualdad, como ha reiterado en sus mítines su candidato a la presidencia de la Junta, Diego Valderas. El PP tendrá un grupo con 22 diputadas (el 46,8%), mientras que las filas socialistas se distribuirán de forma exactamente igualitaria: 28 mujeres y 28 hombres. En la pasada legislatura, el PSOE tenía un 46% de diputadas; el PP, un 32,4%; IU, un 16,6%; y el PA, un 40%. También se dio un paso importante para visualizar la igualdad al coincidir en la Cámara tres mujeres como portavoces de sus respectivos grupos (la popular Esperanza Oña, la izquierdista Concha Caballero y la andalucista Pilar González). El Parlamento estaba, además, en manos de otra mujer: Mar Moreno.