El Estatuto de Castilla y León

Se celebra el 25º aniversario del Estatuto de Castilla y León. Para la mayoría de los españoles las comunidades autónomas no pasan de ser un nivel administrativo intermedio entre la Diputación Provincial y el Estado. Eso era así, o eso se pretendía al inicio. Sin embargo, el tema se ha desbocado y resulta que ahora, la comunidad autónoma es la que dirige, ordena y regula la vida diaria de los ciudadanos, quedando sólo para el Estado las grandes obras, parte de la Hacienda, el Ejército, política exterior... Y poco más. Por ello, no deja ahora de ser indignante que, una vez establecidos (y fomen...

Se celebra el 25º aniversario del Estatuto de Castilla y León. Para la mayoría de los españoles las comunidades autónomas no pasan de ser un nivel administrativo intermedio entre la Diputación Provincial y el Estado. Eso era así, o eso se pretendía al inicio. Sin embargo, el tema se ha desbocado y resulta que ahora, la comunidad autónoma es la que dirige, ordena y regula la vida diaria de los ciudadanos, quedando sólo para el Estado las grandes obras, parte de la Hacienda, el Ejército, política exterior... Y poco más. Por ello, no deja ahora de ser indignante que, una vez establecidos (y fomentados por los que viven de ellos) estos reinos de taifas, sigamos sin enterarnos de por qué se quieren transferir las competencias de justicia (¿será más justa si se gestiona por las comunidades autónomas?), o para qué queremos las competencias hidrológicas (¿habrá más agua?, ¿lloverá más?). Les recuerdo que el mayor éxito de los nacionalismos no ha sido sus estatutos, sino el conseguir dividir al resto de España y particularmente a Castilla.