La crisis de la construcción diluye la oferta inmobiliaria de Fitur

Más turismo y menos casas. La crisis que vive el sector de la construcción se deja sentir este año en la oferta de la Comunidad Valenciana en la feria de turismo (Fitur), que ayer abrió sus puertas en Madrid. Si el año pasado las promotoras y Ayuntamientos aprovecharon claramente el certamen para presentar sus principales proyectos, en esta edición esta oferta está muy diluida. Apenas tres casetas, todas ellos de la provincia de Castellón, muestran maquetas con sus planeamientos urbanísticos. Entre ellas, en la del Ayuntamiento de Torreblanca, la Asociación de Empresas Urbanizadoras y Promotor...

Más turismo y menos casas. La crisis que vive el sector de la construcción se deja sentir este año en la oferta de la Comunidad Valenciana en la feria de turismo (Fitur), que ayer abrió sus puertas en Madrid. Si el año pasado las promotoras y Ayuntamientos aprovecharon claramente el certamen para presentar sus principales proyectos, en esta edición esta oferta está muy diluida. Apenas tres casetas, todas ellos de la provincia de Castellón, muestran maquetas con sus planeamientos urbanísticos. Entre ellas, en la del Ayuntamiento de Torreblanca, la Asociación de Empresas Urbanizadoras y Promotoras presenta uno de los sectores a desarrollar en la población. Y en los catálogos que reparte el Consistorio se detalla la información para adquirir viviendas. Entre la oferta inmobiliaria, Marina d'Or utiliza como reclamo en su caseta de la Comunidad Valenciana carteles con anuncios de venta de viviendas ubicadas únicamente en el extranjero. Marruecos, Egipto, Bulgaria y Brasil son los países que centran estos anuncios. En otros casos, las campañas de publicidad de algunos municipios evitan las zonas más saturadas para vender una imagen menos congestionada urbanísticamente, como es el caso de Oropesa. En Finestrat, un montaje fotográfico oculta las torres de apartamentos de La Cala y sitúa el pueblo junto al mar. También Benidorm prescinde de su paisaje de cemento para jugar con grandes paneles fotográficos.

Fabra se alegra de que su club de golf organice un máster porque "joroba"

Fitur abrió ayer sus puertas en un clima de cierta incertidumbre sobre el efecto que puede tener en el turismo valenciano la crisis económica. Los operadores turísticos están a la expectativa en un sector "muy sensible" a cualquier cambio, explicaba un hotelero castellonense.

En el pabellón número cinco de Ifema, donde se ubica la oferta valenciana, hay este año un claro protagonismo de la Fórmula 1. La presencia este nuevo gran encuentro deportivo se deja notar. Incluso por encima de la Copa del América, cuyo protagonismo de otros años queda reducido éste a un espacio más discreto, en segunda fila. "Me parece muy bien que se anuncie la Fórmula 1, si también está presente el sol y playa", lamentó el presidente de la patronal hotelera de la Costa Blanca (Hosbec), Pere Joan Devesa.

El pabellón recibió la visita a media mañana del rey Juan Carlos y la reina Sofía. La visita de los Reyes de España provocó una avalancha de políticos valencianos, que adelantaron su visita a la feria, prevista habitualmente para hoy, día de la Comunidad Valenciana en Fitur. Así, los Reyes estuvieron acompañados por la vicepresidenta del Gobierno María Teresa Fernández de la Vega, y por el presidente del Consell, Francisco Camps.

Por su parte, el presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, del PP, defendió la adjudicación del máster de golf al Club de Campo del Mediterráneo, que él mismo preside, frente a las pocas alternativas existentes en la provincia. El político popular aseguró que el otro club que puede organizar el evento tiene menos experiencia. Preguntado por la mala imagen que puede dar que la Diputación que preside promocione un evento que se organizará en un club que también preside, Fabra añadió que la decisión no es suya sino del presidente de la Generalitat. "Me alegro porque es mi club y por lo que pueda jorobar a otros", rubricó.