Las estaciones esperan el tren

Por la estación de metro de Cavaleri, en Mairena del Aljarafe (Sevilla), ya podría circular el suburbano. Tiene terminado el túnel, colocadas las vías en los dos sentidos, instalado el ascensor y las escaleras de obras y las mecánicas que bajan desde el vestíbulo, donde ya esperan las máquinas canceladoras de billetes.

Sólo falta poner el granito que cubrirá el suelo de acceso a las vías e instalar las mamparas de seguridad, que separan el andén de la vía y disponen de unas puertas que se abren y se cierran de forma sincronizada con las de los trenes. Esta medida ha costado 18 millones ...

Por la estación de metro de Cavaleri, en Mairena del Aljarafe (Sevilla), ya podría circular el suburbano. Tiene terminado el túnel, colocadas las vías en los dos sentidos, instalado el ascensor y las escaleras de obras y las mecánicas que bajan desde el vestíbulo, donde ya esperan las máquinas canceladoras de billetes.

Sólo falta poner el granito que cubrirá el suelo de acceso a las vías e instalar las mamparas de seguridad, que separan el andén de la vía y disponen de unas puertas que se abren y se cierran de forma sincronizada con las de los trenes. Esta medida ha costado 18 millones de euros, pero elimina el peligro de caídas y disuade a los pasajeros de cambiar de andén a través de las vías.

La estación de Cavaleri será una de las paradas que tiene previsto hacer mañana el presidente de la Junta, Manuel Chaves, en su visita a las obras de la línea 1 del Metro de Sevilla, cuyos trabajos afrontan ya la recta final. Los precedentes en infraestructuras similares desaniman a los responsables de la obra de concretar plazos, aunque la Consejería de Obras Públicas trabaja para que el tren entre en servicio el próximo otoño.

De los 11.848 metros de túneles que había que construir ya están terminados más del 85%, alrededor de 10.000; y la tuneladora, que tardó 22 meses en excavar los 2,2 kilómetros del primer túnel entre el Parque de los Príncipes y la estación de San Bernardo, ha horadado más de la mitad del segundo (algo más de un kilómetro) en tres meses y medio. La previsión es que haya terminado de trabajar en abril.

La máquina está ahora en las inmediaciones del subsuelo del hotel Alfonso XIII, en la calle San Fernando, cerca de la futura parada de Puerta de Jerez. Esta estación, que tuvo que cambiar de ubicación debido a los restos arqueológicos hallados en el que iba a ser su emplazamiento, entrará en funcionamiento aproximadamente dos meses después de que los haga el metro, que en sus primeras semanas de circulación no parará en Puerta de Jerez. Tampoco lo hará en la última de las cuatro estaciones del barrio de Montequinto (Dos Hermanas) que se ha incorporado al trazado recientemente.

La estación de Puerta de Jerez será la más profunda de la línea, con 28 metros bajo tierra. La siguiente en profundidad, la de Plaza de Cuba (24 metros) ya está prácticamente terminada, como la mayoría de las 22 por las que pasará el suburbano. El último acelerón de la obra será para acabar la parada de San Bernardo, las tres primeras de Montequinto y los dos intercambiadores de San Juan de Aznalfarache. El modelo elegido, salvo pequeñas variaciones, ha sido común para todas las estaciones: espacios diáfanos, libres de barreras arquitectónicas y con un diseño sin colores estridentes ni recovecos, para potenciar la sensación de sosiego y de seguridad.