Reportaje:

El ataque como estrategia defensiva

El PP rechaza las dos enmiendas a la totalidad del presupuesto para 2008 - La oposición denuncia el sesgo de unas cuentas que priman a los amigos

Ricardo Costa, portavoz de Economía del PP en las Cortes, lanzó ayer desde la tribuna un tratado sobre el ataque como estrategia defensiva. El socialista Ángel Luna, tan menudo como incisivo, solicitó la retirada de los presupuestos porque "presumen una realidad que no se corresponde con lo que está pasando"; porque las inversiones en agua, "una de las supuestas prioridades" del Consell, se cifran por debajo del gasto en 2006; o por "el sesgo ideológico" de "unas cuentas" que "castigan a la escuela pública de manera sangrante", subvencionan fundaciones del Opus Dei o apuestan por facultades de...

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Ricardo Costa, portavoz de Economía del PP en las Cortes, lanzó ayer desde la tribuna un tratado sobre el ataque como estrategia defensiva. El socialista Ángel Luna, tan menudo como incisivo, solicitó la retirada de los presupuestos porque "presumen una realidad que no se corresponde con lo que está pasando"; porque las inversiones en agua, "una de las supuestas prioridades" del Consell, se cifran por debajo del gasto en 2006; o por "el sesgo ideológico" de "unas cuentas" que "castigan a la escuela pública de manera sangrante", subvencionan fundaciones del Opus Dei o apuestan por facultades de Medicina del arzobispo. "¿Acaso hay un brazo eclesiástico en estas Cortes?", se preguntó Luna. "Desde luego, el poder espiritual está muy bien representado en el Gobierno", se contestó.

Luna: "¿Acaso hay un brazo eclesiástico en estas Cortes?" Costa: "Se remontan a 1936 porque nadie les recordará después de 2008"

Costa replicó con metralla a discreción y un volumen inadecuado para la megafonía de las Cortes. Primero se remontó a 1995 para comparar la "herencia socialista" con la situación económica actual: el paro, la renta, el crecimiento... Luego empezó a colocar las cargas de profundidad que había preparado. Ninguna iba destinada a defender el presupuesto del Consell, todas, contra el Gobierno que preside José Luis Rodríguez Zapatero. "La única política hídrica de Zapatero ha sido poner como cabeza de lista por Valencia a la ministra que derogó el trasvase del Ebro"; "Zapatero promete infraestructuras pero la ministra del socavón solo ejecuta el 50% de lo previsto"; "cuando llega el frío invierno económico, a unos, Zapatero les da mantas, a los valencianos, cajas de cartón".

Luna se mostró perplejo y mantuvo el tono, sin prisa pero sin pausa. "Ha renunciado a defender sus presupuestos. Le enmienda usted la plana a Mariano Rajoy en el Congreso. Si tiene que remontarse a la herencia de 1995, ha perdido el debate".

Costa estuvo a punto de reventar los altavoces de las Cortes: "Yo me he remontado a 1995, no a 1936, como ustedes, que temen que nadie les recuerde cuando pierdan las elecciones en marzo de 2008".

Costa, efectivamente, renunció a defender los presupuestos del Consell, pero ni el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, ni el socialista Joan Ignasi Pla podrían reprochárselo: ambos entraron en el hemiciclo segundos antes de la votación de la enmienda socialista. Hasta Rita Barberá, alcaldesa de Valencia, acudió a la votación.

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El debate volvió a cauces normales cuando Mireia Mollà defendió la enmienda de Compromís a los presupuestos con un repaso al optimismo con que se han previsto los ingresos de la Generalitat en 2008 e insinuaciones sobre los beneficios fiscales para "los amigos del PP". Mollà concluyó con un augurio: "Si la nómina está comprometida tendrán que modificar las inversiones para disponer de fondos".

José Marí, del PP, discrepó "en el diagnóstico y en el tratamiento"; defendió unas cuentas "para la inmensa mayoría de los valencianos, que son de clase media".

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