Carod garantiza al PSC que ERC no romperá el tripartito "pase lo que pase" en las generales

Josep Lluís Carod Rovira lucha por librarse la etiqueta de socio poco fiable. El consejero de la vicepresidencia ha decidido jugar la carta de la estabilidad y se ha comprometido a que su partido, Esquerra Republicana, mantendrá la apuesta por el Gobierno tripartito catalán "pase lo que pase" en las elecciones generales de marzo. Carod trasladó este compromiso a los diputados del Partit dels Socialistes en un encuentro que mantuvieron el pasado miércoles en el Montseny. Después de Carod, el presidente de Iniciativa per Catalunya, Joan Saura, se comprometió en la misma línea.

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Josep Lluís Carod Rovira lucha por librarse la etiqueta de socio poco fiable. El consejero de la vicepresidencia ha decidido jugar la carta de la estabilidad y se ha comprometido a que su partido, Esquerra Republicana, mantendrá la apuesta por el Gobierno tripartito catalán "pase lo que pase" en las elecciones generales de marzo. Carod trasladó este compromiso a los diputados del Partit dels Socialistes en un encuentro que mantuvieron el pasado miércoles en el Montseny. Después de Carod, el presidente de Iniciativa per Catalunya, Joan Saura, se comprometió en la misma línea.

En su encuentro con el grupo parlamentario socialista, el líder republicano pronunció varias veces las palabras "estabilidad", "seriedad" y "proyecto colectivo". El auditorio lo recibió con entusiasmo. Y es que, como recordaba un diputado socialista tras la reunión, "algunos de estos conceptos brillaron por su ausencia en la anterior legislatura". De ahí la alegría por el cambio de discurso del ahora consejero de la Vicepresidencia.

Las palabras de Carod comprometiéndose a mantener la apuesta de Esquerra por el tripartito "pase lo que pase" en las elecciones generales de marzo fueron otro bálsamo para un Partit dels Socialistes siempre atento a los continuos vaivenes del socio republicano.

Todos saben que las elecciones de marzo pueden suponer una prueba de fuerza en toda regla de la capacidad de aguante del Gobierno de Montilla. Sobre todo si se confirma lo que predicen las encuestas y los de Carod Rovira sufren un descenso considerable en número de votos y escaños con respecto a los resultados de 2004. De producirse esto, los sectores críticos del partido que capitanean Joan Carretero y Uriel Bertran respectivamente, se verán envalentonados para pedir la cabeza de los dirigentes del partido y para exigir un cambio en la política de alianzas de ERC.

No será así. Al menos si Carod tiene la fuerza suficiente para, ocurra lo que ocurra en marzo, convencer a su partido de que el Gobierno con socialistas y ecosocialistas es una apuesta estratégica a largo plazo.

Lo que más tranquilizó a los diputados del PSC fue, según varios de los asistentes, la "unidad de discurso" que exhibieron Carod, Saura y Montilla. Más aún teniendo en cuenta que cada uno habló por separado.

Tanto Carod como Saura hablaron de la necesidad de profundizar en la "cultura común" del Gobierno de l'Entesa y de escribir un "relato" que ayude al Gobierno a transmitir su trabajo a la sociedad.

Carod y Saura pronunciaron estas palabras el pasado miércoles y Montilla lo hizo ayer, durante una intervención a puerta cerrada. En su encuentro, Montilla pidió otra cosa a sus diputados: trabajar para que los ciudadanos visualicen la labor del grupo parlamentario del PSC.

Ésta no es una cuestión baladí. En la sede socialista de la calle de Nicaragua hay una creciente preocupación por el desconocimiento general de la labor que hace el partido en el Parlament y porque ésta se confunde sistemáticamente con la de sus socios de l'Entesa y del Gobierno.

La advertencia de Montilla fue recibida sin dramatismos. Hasta hubo tiempo para reírse: Los diputados acabaron su concentración de dos días cantándole una canción al presidente. Un cha, cha, cha con referencias humorísticas al AVE, a los trenes de Cercanías y, según algunas fuentes, al "salero" del presidente.