Un obrero muere en Getafe al ser atrapado por una prensadora
El operario, de 45 años, es la víctima 109 en el tajo desde que comenzó el año
La región registró ayer una nueva víctima laboral, la número 109 desde que comenzó el año, según los datos de los que disponen los sindicatos CC OO y UGT. El operario, un hombre de 45 años de nacionalidad española y residente en Móstoles, fue atrapado por una máquina prensadora de materiales plásticos con la que estaba trabajando en Getafe, según informó una portavoz municipal.
Fueron los propios compañeros los que avisaron a Emergencias 112 a las 17.40 para alertar del siniestro. Sin embargo, de nada sirvieron los esfuerzos de los Bomberos de la Comunidad de Madrid para rescatar el cue...
La región registró ayer una nueva víctima laboral, la número 109 desde que comenzó el año, según los datos de los que disponen los sindicatos CC OO y UGT. El operario, un hombre de 45 años de nacionalidad española y residente en Móstoles, fue atrapado por una máquina prensadora de materiales plásticos con la que estaba trabajando en Getafe, según informó una portavoz municipal.
Fueron los propios compañeros los que avisaron a Emergencias 112 a las 17.40 para alertar del siniestro. Sin embargo, de nada sirvieron los esfuerzos de los Bomberos de la Comunidad de Madrid para rescatar el cuerpo del trabajador, ya que, cuando lograron liberarle de la maquinaria, estaba muerto.
El fallecido trabajaba para la empresa Contenur, ubicada en el polígono de Los Ángeles de Getafe. La sociedad, dedicada a la fabricación de contenedores de plástico y PVC, era ayer un búnker prácticamente infranqueable. Todas las personas que abandonaron las instalaciones rechazaron hacer declaraciones e incluso aseguraron no saber lo sucedido. Este periódico intentó ponerse en contacto con algún responsable de la empresa. La única respuesta fue un teléfono colgado al identificarse el interlocutor como periodista de EL PAÍS.
La responsable sindical de UGT, Lucila Sánchez, se mostró ayer "indignada" y acusó a la Comunidad de Madrid de "no dar la cara ni tomar medidas para solucionar algo que es ya un problema social".