El equipo del yogur

La famosa dieta mediterránea no le pareció tan buena al patrón del Desafío Español, el polaco Karol Jablonski, cuando llegó al equipo. "Venía del frío, del invierno de Polonia. Estaba acostumbrado a poca luz, pasar mucho tiempo en casa y comer mucha carne. Y llega a Valencia, el sol, el calor... El biorritmo le cambió". El médico del barco español, Pablo Díaz de Munío, ha confeccionado una dieta que nadie puede saltarse. Ni siquiera cuando, como ayer, el equipo es el último en derrotar al Alinghi antes de la final de la Copa del América. "Nunca han de pasar más de dos horas al día sin comer", ...

La famosa dieta mediterránea no le pareció tan buena al patrón del Desafío Español, el polaco Karol Jablonski, cuando llegó al equipo. "Venía del frío, del invierno de Polonia. Estaba acostumbrado a poca luz, pasar mucho tiempo en casa y comer mucha carne. Y llega a Valencia, el sol, el calor... El biorritmo le cambió". El médico del barco español, Pablo Díaz de Munío, ha confeccionado una dieta que nadie puede saltarse. Ni siquiera cuando, como ayer, el equipo es el último en derrotar al Alinghi antes de la final de la Copa del América. "Nunca han de pasar más de dos horas al día sin comer", pregona Díaz de Munío, también molinillo.

El régimen comienza al abrir los ojos. Zumo o leche para ir al gimnasio. A las 9.30 llega el desayuno de verdad: pan, cereales, fiambre, queso, membrillo, café y galletas. Desde entonces, cada dos horas hay que echarse algo a la boca: frutos secos, fruta y cereales entre horas, y arroz, pasta y legumbres para comer. De cena, a las 20.30, ya en casa, carne o pescado, patata cocida y ensalada. Y, siempre, el alimento estrella, el yogur. "Es muy habitual en este equipo. Es un gran alimento, es nutritivo y regula el intestino", explica. Díaz Munío impone otras pautas: dos litros de agua al día, no mezclar la fruta con nada y adiós al jamón serrano. "No lo probamos. Es nutritivo, pero demasiado salado", cuenta. ¿Y los dulces? "A determinadas horas son buenos", afirma. Por eso aconseja dos onzas de chocolate negro antes de acostarse, "para regular el nivel de glucosa".

Con el estómago lleno, los tripulantes del Desafío se apuntaron ayer -lluvia por la mañana, sol espléndido por la tarde-, un meritorio triunfo en la última jornada del acto 13. Meritorio porque mantuvo a raya al Alinghi, a siete segundos. Y porque supuso la última victoria de un equipo sobre el campeón antes de la final. El grupo suizo se retira a esperar al campeón de la Louis Vuitton, que comienza el lunes 16, con cuatro victorias más. ¡Y han competido con el barco antiguo! ¿Qué harán con el nuevo, el SUI100?

El Desafío entrará cuarto en la Copa Louis Vuitton. El equipo ha cumplido. Ha estrechado lazos y la compenetración entre unos regatistas de ocho nacionalidades es mejor. "Es una orquesta que hay que afinar. Cada minuto del día se nota que cada uno es de un sitio. Hasta entre el gallego y el cántabro", cuenta Díaz de Munío. Por un día, ablandará su dieta para regalar a la tripulación unos canelones -"me los piden mucho"- o carne guisada. El polaco tiene ya mejor cara: "Ha ganado peso y perdido grasa".

Primera manga: 1. Desafío, 1h 20m 13s. 2. Alinghi, a 7s. 3. New Zealand, a 1m 1s. Segunda manga: 1. Alinghi, 1h 12m 46s. 2. Oracle, a 39s. 3. Mascalzone, a 1m 21s. 7. Desafío, a 2m 43s (el equipo español acaba sexto el acto 13). Clasificación antes de la Louis Vuitton: 1. New Zealand (comenzará con 4 puntos). 2. Oracle. 3. Luna Rossa. 4. Desafío. Los tres, con tres puntos.