Reportaje:COYUNTURA INTERNACIONAL

Lastrados por el crudo

La economía rusa se ralentizará hasta un 6% durante este año

Rusia continúa su senda ascendente que le ha llevado a quintuplicar su PIB y multiplicar por cuatro su PIB per cápita en siete años. No obstante, la ralentización de este año ha puesto en duda su modelo de crecimiento centrado en el petróleo. Los expertos apuntan a que las inversiones privadas no se consolidan debido a las nacionalizaciones y que el tejido industrial se deteriora.

Los organismos oficiales rusos han señalado que el PIB del gigante euroasiático ha crecido un 6,8% durante el año pasado, un crecimiento superior en cuatro décimas al registrado durante 2005 y que ha ce...

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Rusia continúa su senda ascendente que le ha llevado a quintuplicar su PIB y multiplicar por cuatro su PIB per cápita en siete años. No obstante, la ralentización de este año ha puesto en duda su modelo de crecimiento centrado en el petróleo. Los expertos apuntan a que las inversiones privadas no se consolidan debido a las nacionalizaciones y que el tejido industrial se deteriora.

Uno de los motores del crecimiento de la economía rusa ha sido la inversión, que se elevó un 13,5% a lo largo del pasado ejercicio
El PIB del gigante euroasiático ha crecido un 6,8% en el año pasado, una tasa superior en cuatro décimas a la registrada durante 2005

Los organismos oficiales rusos han señalado que el PIB del gigante euroasiático ha crecido un 6,8% durante el año pasado, un crecimiento superior en cuatro décimas al registrado durante 2005 y que ha cerrado un trienio de gran bonanza económica para el país uroasiático. No obstante, para este año, los datos auguran una leve ralentización del producto que algunos cifran en un 6%, debido a la caída del petróleo y de la producción industrial.

Los expertos consideran que la economía rusa es excesivamente dependiente de los envíos de hidrocarburos. Durante la segunda mitad del año pasado, el precio del crudo cayó desde los 70 dólares, uno de sus mayores récords históricos, hasta los cerca de 56 dólares actuales -53 dólares en 2008, según las autoridades rusas-, una caída que ha perjudicado a los países exportadores, acostumbrados a inusuales recaudaciones. Durante el año pasado, las exportaciones rusas crecieron un 25%, pero esta media cayó notablemente en el segundo semestre.

Un sexenio muy próspero

El país es el mayor exportador mundial de gas y el primero de petróleo, lo que sumado a los elevados precios de los combustibles han generado uno de los sexenios más prósperos para el país. Los datos señalan que el PIB ruso se quintuplicó durante los últimos siete años, al pasar de 196.000 millones de dólares en 1999 a casi un billón de dólares en 2006. Durante el mandato de Vladímir Putin, el PIB per cápita de Rusia también se ha multiplicado por cuatro hasta alcanzar los 7.000 dólares.

Los datos oficiales indican que 20 millones de personas han salido de la pobreza, a pesar de que Rusia es uno de los países con mayor tasa de multimillonarios del mundo. Una bonanza que, según algunos analistas, no ha ido de la mano de inversiones en infraestructuras, en mejorar el tejido industrial, ni en diversificar las exportaciones. Detractores del Gobierno de Putin advierten que la ola de nacionalizaciones en sectores estratégicos impide la consolidación de una industria privada que garantice el crecimiento en el largo plazo, más allá del petróleo.

Los datos señalan que la producción industrial cerró en 2006 con un 4,4% de crecimiento, más de dos puntos por debajo del crecimiento del PIB. Los expertos explican que la escasa inversión en nuevas tecnologías para sustituir maquinaria obsoleta ha sido uno de los principales causantes de este estancamiento. Por otro lado, uno de los motores del crecimiento fue la inversión, que se elevó un 13,5% el pasado curso.

Precios al alza

Otro de los problemas de la economía rusa es su elevada inflación. Los precios se elevaron un 9% en 2006, una cifra considerada positiva por el Gobierno si se compara con el 18,6% de 2001. El objetivo del Gobierno ruso es reducir la inflación por debajo de 10%, y mantenerla cercana al 5% durante 2010. El IPC acumuló en enero y febrero un 1,5 % de incremento, mientras que para los primeros días de marzo se ubicó en 0,1%, según las cifras del Ejecutivo.

En cualquier caso, los diferentes organismos internacionales y analistas advierten que hay que aprovechar el potencial ruso para consolidar la economía en el largo plazo. Para ello sugieren privatizar los monopolios públicos y formar un fondo de pensiones con el excedente de petrodólares que van acumulando en el fondo de estabilización. Este último representa ya un 9,9% del PIB de Rusia.

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