El grupo alemán lleva gastados 230 millones en su oferta española
La batalla por Endesa va dejando facturas a sus protagonistas sin que eso les asegure fruto alguno. Gas Natural cifró hace semana y media en 111 millones los gastos en que incurrió en su fracasada oferta pública de adquisición (OPA). Ayer fue el grupo alemán E.ON el que sacó cuentas de los gastos: ya son 230 millones los que lleva acumulados, según indicó ayer su director financiero, Marcus Schenk.
No son los gastos de la OPA, sin embargo, los que hicieron caer el beneficio del grupo alemán un 32% en 2006, sino la ausencia de plusvalías extraordinarias como las logradas con las ventas d...
La batalla por Endesa va dejando facturas a sus protagonistas sin que eso les asegure fruto alguno. Gas Natural cifró hace semana y media en 111 millones los gastos en que incurrió en su fracasada oferta pública de adquisición (OPA). Ayer fue el grupo alemán E.ON el que sacó cuentas de los gastos: ya son 230 millones los que lleva acumulados, según indicó ayer su director financiero, Marcus Schenk.
No son los gastos de la OPA, sin embargo, los que hicieron caer el beneficio del grupo alemán un 32% en 2006, sino la ausencia de plusvalías extraordinarias como las logradas con las ventas de Viterra y Ruhrgas Industries en 2005. El beneficio neto ajustado crece un 20% hasta 4.386 millones, según la empresa. Ese crecimiento estaría en línea con el aumento del 20,7% de las ventas, hasta 67.759 millones, con lo que triplica con creces los 19.637 millones que facturó Endesa el año pasado.
El beneficio bruto de explotación ajustado (EBITDA) del grupo alemán crece un 11% hasta 11.353 millones y el beneficio neto ajustado aumenta un 12% hasta 8.150 millones.
En la junta de accionistas de E.ON que se celebrará el 3 de mayo de 2007, el Consejo de Dirección y Supervisión propondrá pagar un dividendo de 3,35 euros (2,75 euros en el ejercicio anterior) por acción ordinaria con derecho a dividendo.
La retribución de la alta dirección de E.ON se redujo ligeramente en 2006 hasta 21,7 millones. Pero fue un año de cambios en la cúpula que dificulta la comparación. La empresa pagó otros 11,7 millones a ex miembros de la alta dirección, más del doble que el año anterior. Las provisiones para pensiones pasaron de 89 a 99 millones. El ejecutivo mejor pagado de la empresa es su presidente ejecutivo, Wulf Bernotat, que ganó 4,93 millones en 2006. Hay otros cinco ejecutivos con un sueldo en el entorno de los tres millones de euros anuales.
La factura de PricewaterhouseCoopers, auditor del grupo, creció un 17% hasta 61 millones de euros, incluyendo otros servicios distintos de la auditoría.