MIRADOR

Avisos desde las Bolsas

Los mercados de acciones tiemblan. Lo hacen porque llevaban una muy larga temporada registrando alzas importantes; algunos de ellos, como el chino, en niveles históricamente elevados y, según muchos analistas, absurdamente hinchados. Tres episodios aparecen como desencadenantes de las jornadas de intensa purga que se iniciaron el martes con una caída de la Bolsa de China en más del 9%, un descenso del 3,29% en Wall Street y pérdidas del 3% en el Ibex. El primero es, lógicamente, la caída de la Bolsa de Shanghai; el segundo es el aumento del riesgo geopolítico por la intensificación de las tens...

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Los mercados de acciones tiemblan. Lo hacen porque llevaban una muy larga temporada registrando alzas importantes; algunos de ellos, como el chino, en niveles históricamente elevados y, según muchos analistas, absurdamente hinchados. Tres episodios aparecen como desencadenantes de las jornadas de intensa purga que se iniciaron el martes con una caída de la Bolsa de China en más del 9%, un descenso del 3,29% en Wall Street y pérdidas del 3% en el Ibex. El primero es, lógicamente, la caída de la Bolsa de Shanghai; el segundo es el aumento del riesgo geopolítico por la intensificación de las tensiones en Irán y, por fin, las declaraciones del ex presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, sobre la probabilidad de recesión en Estados Unidos.

No es fácil identificar el peso especifico de cada uno de ellos. Pero puede intuirse que el más relevante en el medio plazo tiene que ver sin duda con las perspectivas de continuidad de la expansión económica mundial. Y en este punto, las declaraciones de Greenspan no son sino una advertencia, guiada por la estabilización de los beneficios empresariales en aquel país, cuya extensión al resto del mundo no es del todo válida, puesto que la situación de los fundamentales económicos es bien diferente.

La interdependencia de los mercados financieros, que son, no se olvide, el producto más acabado de la globalización, avala un riesgo permanente de contagio. Aunque los fundamentos económicos de Europa sean sanos y prometedores, las carteras y quienes las configuran son globales. Las purgas bursátiles hoy son tanto más dolorosas cuanto mayor es el grado de popularización de la inversión en acciones. Que se lo digan a los inversores chinos.

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