Juicio por el mayor atentado en España | 11-M

Zougam asegura que rechazó en 2001 una oferta del CNI para convertirse en confidente

Jamal Zougam, supuesto autor material de la matanza de los trenes, aseguró ayer que en 2001 rechazó una oferta que le hicieron dos agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) para convertirse en su confidente. La misión que supuestamente le pedían, aunque no aclaró por qué se fijaron en él, era que informase sobre islamistas que pasaran por España.

La revelación fue a preguntas de José María de Pablo, abogado de la Asociación de Ayuda a las Victimas del 11-M que, como Zougam contestaba, no le preguntó por ETA. Zougam se entretuvo en contar la escena que vivió en la tienda de fruta...

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Jamal Zougam, supuesto autor material de la matanza de los trenes, aseguró ayer que en 2001 rechazó una oferta que le hicieron dos agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) para convertirse en su confidente. La misión que supuestamente le pedían, aunque no aclaró por qué se fijaron en él, era que informase sobre islamistas que pasaran por España.

La revelación fue a preguntas de José María de Pablo, abogado de la Asociación de Ayuda a las Victimas del 11-M que, como Zougam contestaba, no le preguntó por ETA. Zougam se entretuvo en contar la escena que vivió en la tienda de frutas que tenía a medias con su hermanastro Mohamed Chaui en la calle del Tribulete, muy cerca de su locutorio.

"Estaba un día en mi tienda", arrancó Zougam, "y llegaron dos personas saludando. Me enseñaron una placa de policía y me dijeron que les acompañara. Nos subimos a un coche y me dijeron que si colaboraba con ellos me ayudarían, que si yo podía ayudarles a ellos, ellos me ayudarían, ayudándome a traer a mi familia de Marruecos, a darme la nacionalidad", relató. Según dijo, él les contestó que no sabía ni de qué le hablaban y que no tenía tiempo para hacer eso, porque se pasaba el día trabajando y se solía levantar a las cinco de la mañana para ir a la lonja a comprar el género. Por eso, agregó, nunca colaboró con el CNI.

Inmediatamente acusó a este servicio de haberle torturado durante su detención, que, en realidad, fue realizada por la Comisaría General de Información. Los partes médicos no reflejaron los malos tratos. "Es que son profesionales, pueden torturar sin dejar marca", dijo, después de aclarar que si nunca ha declarado eso en los juzgados en tres años fue por culpa de sus primeros abogados.

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