De mujeres y tallas

Leo el editorial reciente sobre la anorexia y la nueva configuración de las tallas. Les felicito por hacerse eco del tema y reivindicar que la verdadera mujer española se refleje en las tallas de las tiendas de ropa. Sin embargo, echo de menos que eso también se refleje en la publicidad y los reportajes de moda, sobre todo los de su dominical, al que por otro lado también quiero alabar por su reportaje reciente sobre el tema, que, como hiciera ya EL PAÍS en su sección de Madrid, se hace eco de la verdadera realidad de los enfermos y enfermas de anorexia, que también afecta a adultos, que no es...

Leo el editorial reciente sobre la anorexia y la nueva configuración de las tallas. Les felicito por hacerse eco del tema y reivindicar que la verdadera mujer española se refleje en las tallas de las tiendas de ropa. Sin embargo, echo de menos que eso también se refleje en la publicidad y los reportajes de moda, sobre todo los de su dominical, al que por otro lado también quiero alabar por su reportaje reciente sobre el tema, que, como hiciera ya EL PAÍS en su sección de Madrid, se hace eco de la verdadera realidad de los enfermos y enfermas de anorexia, que también afecta a adultos, que no es una cosa de "adolescentes estúpidos", sino que nos puede pasar a cualquiera. Que es una consecuencia más de nuestro perfeccionismo, obsesiones, etc. pero que son personas normales (como todos los enfermos mentales). Ya era hora de que en los medios de comunicación se mostrara esa cara y no la imagen morbosa de las modelos delgadísimas y enfermas esqueléticas, con sondas y todo lo demás.

Sólo un pero: no dejen que este tema se politice y por tanto, agradezcan que se cree un pacto social por la anorexia y la bulimia igual que elogian la nueva normativa de tallaje (lo haga el partido que lo haga), resalten sus errores (que los hay, claro) pero también sus virtudes.