Un grupo ecologista se encadena para impedir que se abra una pista forestal
El proyecto de Sant Llorenç del Munt fue autorizado hace 20 años
Una veintena de ecologistas se encadenaron a una máquina excavadora durante todo el día de ayer hasta que, hacia las cuatro de la tarde, los Mossos d'Esquadra rompieron las cadenas. La acción tenía como motivo protestar por una pista forestal que la Diputación de Barcelona está abriendo en el parque natural de Sant Llorenç del Munt i la Serra de l'Obac.
La pista contra la que protesta la Coordinadora per a la Salvaguarda del Massís de Sant Llorenç desde hace ya 17 años fue aprobada por el Gobierno catalán hace dos décadas. No obstante, hasta el lunes no empezó su construcción.
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Una veintena de ecologistas se encadenaron a una máquina excavadora durante todo el día de ayer hasta que, hacia las cuatro de la tarde, los Mossos d'Esquadra rompieron las cadenas. La acción tenía como motivo protestar por una pista forestal que la Diputación de Barcelona está abriendo en el parque natural de Sant Llorenç del Munt i la Serra de l'Obac.
La pista contra la que protesta la Coordinadora per a la Salvaguarda del Massís de Sant Llorenç desde hace ya 17 años fue aprobada por el Gobierno catalán hace dos décadas. No obstante, hasta el lunes no empezó su construcción.
Uno de los activistas, Francesc Macià, explicó que se estaba "destrozando un área de alto valor ecológico". "No han querido oír ninguna de las alternativas que les hemos planteado". Además, según los ecologistas, "el proyecto y el estudio de impacto ambiental es poco riguroso y hay errores muy graves". "Nos rompe el corazón ver cómo se talan más de 2.000 encinas", lamentó Macià. El domingo hay convocada una nueva protesta.
La Diputación discrepa de los ecologistas. Según Martí Domènech, coordinador de Espacios Naturales de la Diputación, el tramo de pista, de dos kilómetros, "ni estará asfaltado ni estará abierto a los vehículos, sino que será exclusivamente para la prevención de incendios". La Diputación argumenta que con la pista se protegerán 5.000 hectáreas de bosque que ahora no disponen de ningún camino practicable para luchar contra el fuego.