Reportaje:

Sin médico pero con cementerio

Los vecinos del barrio de Montecarmelo critican los planes del Ayuntamiento de ampliar el cementerio de Fuencarral

No tienen un médico cercano al que visitar cuando caen enfermos, pero sí un lugar de enterramiento para el día en que mueran. Los habitantes de las 8.500 viviendas con que contará el nuevo barrio de Montecarmelo, en el distrito de Fuencarral-El Pardo, se han levantado contra los planes municipales de ampliar el cementerio. Unas 17.000 alegaciones presentadas en el Ayuntamiento y 24.000 cartas de protesta reunidas en un barrio que tendrá 25.000 vecinos dan fe del levantamiento.

Con esta avalancha de papel impreso, denuncian que el Consistorio pretende convertir lo que era un pequeño camp...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

No tienen un médico cercano al que visitar cuando caen enfermos, pero sí un lugar de enterramiento para el día en que mueran. Los habitantes de las 8.500 viviendas con que contará el nuevo barrio de Montecarmelo, en el distrito de Fuencarral-El Pardo, se han levantado contra los planes municipales de ampliar el cementerio. Unas 17.000 alegaciones presentadas en el Ayuntamiento y 24.000 cartas de protesta reunidas en un barrio que tendrá 25.000 vecinos dan fe del levantamiento.

Con esta avalancha de papel impreso, denuncian que el Consistorio pretende convertir lo que era un pequeño camposanto de pueblo -incluso bonito, dicen algunos: "La primera tumba es del siglo XIX y hay algunas lápidas de brigadistas internacionales muertos durante la Guerra Civil escritas con caracteres cirílicos"- en una "macrociudad funeraria".

La zona carece de biblioteca. Las obras del centro de salud empezarán en un año

Cuando se les pregunta por la ampliación de los 65.000 metros cuadrados del recinto actual a los 71.000 adicionales del cementerio y tanatorio, los vecinos desgranan toda una lista de reproches hacia el Ayuntamiento. Hablan de la escasa información que han recibido, del colapso de los accesos al barrio que prevén, que se está destinando al cementerio un suelo que podría utilizarse para los equipamientos sociales que tanta falta les hacen... Montecarmelo, un barrio en el que viven entre 3.000 y 4.000 personas -y en el que es previsible que dentro de un año se alcancen las 18.000-, no tiene ninguna biblioteca. Sólo una línea de autobús llega hasta allí. Las obras del centro de salud no comenzarán antes del próximo verano. Las zonas verdes escasean...

Los vecinos temen que el tráfico que generará el futuro cementerio colapse las calles donde viven. Alberto Novazo, de la asociación de vecinos, explica que el Ayuntamiento pretendía evitar este problema mediante una salida de la M-40 a la altura de Montecarmelo, pero que Fomento lo impidió por la cercanía con la ya existente en la avenida de Ventisquero de la Condesa. En el Ayuntamiento dicen no tener constancia de que el ministerio denegara el permiso de obra.

Situado en una loma desde la que se divisa el monte de El Pardo, las tapias del camposanto colindan con la parcela en la que se está construyendo un colegio y rozan un edificio moderno. Según los opositores a la ampliación, se está incumpliendo la normativa que establece una distancia mínima de 500 metros entre un cementerio y las viviendas. "Esta normativa no existe. Muchos cementerios han sido absorbidos por los cascos urbanos", replican los responsables municipales.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Y, por último, los vecinos se sienten engañados: "En marzo de 2005, cuando dudaba si comprarme el piso o no, pregunté en Urbanismo si pensaban ampliar el cementerio y me dijeron que no. En julio, nos decidimos a gastarnos una millonada y trasladarnos aquí. Hace unos meses leí que en el Ayuntamiento cambió de opinión y ahora sí quieren ampliarlo. Me siento estafada", cuenta Olga Boto, que se lamenta por el ir y venir continuo de cortejos fúnebres en el que se van a criar sus dos hijos pequeños. "Nos vinimos a vivir aquí por los niños, y ahora nos enteramos de que van a crecer rodeados por un tanatorio".

"Hay más salas funerarias que fallecidos al día"

"Estamos aquí para apoyar a los vecinos de Montecarmelo. La ampliación del cementerio no cuenta con un estudio de movilidad previo. Y el alcalde, con su actitud prepotente, ni se ha dignado a recibir a los que se han opuesto". Así se expresó la portavoz socialista en el Ayuntamiento, Trinidad Jiménez, que se desplazó ayer hasta el cementerio de Fuencarral y dejó clara la postura de su grupo ante el proyecto municipal: totalmente contraria. Recibida por una decena de vecinos como un peldaño más en su lucha contra Ruiz-Gallardón, Jiménez aprovechó su visita para recordar que el pasado mes de julio su grupo e IU votaron en contra del plan especial que definía los destinos del suelo afectado.

El responsable municipal de Movilidad, Fernando Autrán, niega que los vecinos desconocieran los planes de ampliación. "El Plan General de Ordenación Urbana de 1996 ya recogía esta idea", indica.

Tampoco se ponen de acuerdo Autrán y los portavoces vecinales en cuanto a la necesidad de las obras. "Es absolutamente imprescindible para la viabilidad de la empresa funeraria y para atender una función social muy importante", recalca el primero. "Una media de 72 personas muere al día en Madrid, donde ya hay 154 salas de tanatorios. Habrá más salas funerarias que fallecidos al día. Las proyecciones demográficas indican que no tiene sentido esta inversión de dinero público. La única explicación es que la empresa mixta está tratando de alcanzar una posición de dominio a largo plazo en el norte", señala César López, residente en el barrio.

Alberto Navazo, de la asociación de vecinos, adelantó que estudiarán con el alcalde la necesidad de ampliar las dotaciones funerarias de la capital. "Creemos que Madrid tiene suficientes zonas de enterramiento para cubrir durante los próximos 10 años las necesidades con holgura", manifestó.

Autrán no pierde la ocasión de lanzar una carga de profundidad a sus rivales políticos: "A ver si Trinidad Jiménez explica a los más de 300 empleados de la empresa funeraria, que apoyaron la ampliación, las razones por las que pone en riesgo sus puestos de trabajo".

Se lleven a cabo las obras o no, en ningún caso comenzarán antes de 2007.

Sobre la firma

Archivado En