Fracasan las negociaciones para renovar el convenio de los empleados españoles de la base de Rota
El comité laboral de la base naval de Rota (Cádiz), que representa a un colectivo de 1.120 empleados civiles españoles, ha dado por "fracasadas" las negociaciones para la firma de un nuevo convenio colectivo, después de que, en su última propuesta, las administraciones española y estadounidense presentaran una oferta de subida salarial que "tiene un coste cero para las administraciones contratantes" y "no restituye ni total ni parcialmente la pérdida del poder adquisitivo" que sufre desde el año 2000 el colectivo. Los empleados reclaman una compensación económica por la aplicación, desde el añ...
El comité laboral de la base naval de Rota (Cádiz), que representa a un colectivo de 1.120 empleados civiles españoles, ha dado por "fracasadas" las negociaciones para la firma de un nuevo convenio colectivo, después de que, en su última propuesta, las administraciones española y estadounidense presentaran una oferta de subida salarial que "tiene un coste cero para las administraciones contratantes" y "no restituye ni total ni parcialmente la pérdida del poder adquisitivo" que sufre desde el año 2000 el colectivo. Los empleados reclaman una compensación económica por la aplicación, desde el año 2000, del IRPF de sus nóminas por decisión del entonces ejecutivo español del Partido Popular (PP). Con la aplicación de la medida se rompía un compromiso asumido por el Estado español desde 1950 como compensación al hecho diferenciador que sufren los trabajadores civiles por encontrarse al servicio de dos administraciones de Defensa.
El presidente del comité, José Sabido, aseguró que en la negociación, la parte social "ha rebajado ostensiblemente sus justas reivindicaciones", pero los representantes de los departamentos de personal de las marinas de España y Estados Unidos "han dado una respuesta negativa a cualquier medida que subsane nuestra pérdida del poder adquisitivo". Se trata del tercer año consecutivo en el que fracasan las negociaciones para la firma de un nuevo convenio. En los dos últimos años las partes se han regido por los términos prorrogados del anterior acuerdo, de 2003.
El comité considera "corresponsables" del fracaso de las negociaciones a las administraciones española y norteamericana. A la primera, por ser "culpable de la pérdida del poder adquisitivo" de los empleados, y a la segunda "por no mejorar las condiciones salariales", como pagador de las nóminas de los trabajadores civiles españoles. Sabido explicó que, "después de más de dos años de gobierno socialista, seguimos esperando la solución prometida a la pérdida económica provocada por la aplicación del IRPF en las nóminas".
Las negociaciones sí habían avanzado en otros capítulos referidos al desarrollo de la jornada continua y la compensación con horas libres a los grupos de rentas más bajas, aunque la aplicación de la medida quedaba "a discreción del Jefe de Departamento", extremo que rechazó la parte laboral.
Trabajadores y Administraciones han previsto el inicio de nuevas negociaciones a comienzo de 2007.