Reportaje:ESCAPADAS | Torremocha de Jarama

Semblanza de un pueblo labriego

En Torremocha, pueblo huertano, olivarero, vitivinícola y triguero de la vega del Jarama, hay un museo de la Agricultura en el que se exhibe desde el más tosco arado romano, labrado en madera desde la punta del timón a la de la reja, hasta un trillo de discos metálicos con asiento y palanca para voltear la parva que, a principios del siglo XX, debió de ser el Ferrari de las eras. Para más interés, está en el polígono Torrearte, rodeado de talleres donde podemos ver trabajar a 19 artesanos -cesteros, herreros, ebanistas, alfareros...-, siempre y cuando tengamos la suerte de coincidir con alguno...

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En Torremocha, pueblo huertano, olivarero, vitivinícola y triguero de la vega del Jarama, hay un museo de la Agricultura en el que se exhibe desde el más tosco arado romano, labrado en madera desde la punta del timón a la de la reja, hasta un trillo de discos metálicos con asiento y palanca para voltear la parva que, a principios del siglo XX, debió de ser el Ferrari de las eras. Para más interés, está en el polígono Torrearte, rodeado de talleres donde podemos ver trabajar a 19 artesanos -cesteros, herreros, ebanistas, alfareros...-, siempre y cuando tengamos la suerte de coincidir con alguno, porque, a diferencia de los labriegos, éstos no faenan de sol a sol.

Paseando por las calles de Torremocha , entre casas de amplios portones -aptos para el tractor- y muros de mampostería caliza -la que da la vecina sierra de Patones, o de la Caleriza-, nos tropezamos con no pocas referencias a la tradición agrícola del lugar: aquí, un carro sobre un pedestal; allá, una fuente en forma de pozo; acullá, una vieja noria de sangre, y en el centro mismo del pueblo, junto a la iglesia de San Pedro -espléndida galería renacentista y pinturas murales del siglo XIV-, media docena de tinajones de vino que surten agua por sendos caños, invirtiendo el milagro de las bodas de Canaán.

A un kilómetro del pueblo, junto a la carretera de Uceda, se alza un puente fantasmal, un puente sin agua, en mitad de un cebadal. En su día vio correr el canal de Cabarrús, una gran acequia construida a finales del siglo XVIII por el conde homónimo, francés afincado en España, amigo de Jovellanos e ilustrado como él, que soñó poner en regadío la vega del Jarama. Pero los nativos, por las razones que fueran, prefirieron el secano, y hoy de aquel sueño apenas queda nada: sólo piedras polvorientas en un mar de espigas.

Más adelante, a la vera del Jarama, queda la Antigua Fábrica de Harinas. Erigida sobre un molino medieval en el siglo XIX y restaurada en 2002 para celebrar bodas, la vieja harinera es, con su robusta torre, su nostálgico azud, su ermita y sus arboledas, un marco excepcional, como se dice en estos casos.

Y allí también está, oculta entre las alamedas, la Casa del Puente Colgante, un caserón de estilo holandés que la mano maternal de la uruguaya Silvia Leal ha convertido en uno de los mejores alojamientos rurales de Madrid.

Un puente de hierro, apoyado sobre los raigones de otro romano, permite pasar de la orilla madrileña del Jarama a la guadalajareña, para subir al cortado al que se asoma, desde tiempos inmemoriales, Uceda. Cerca de la iglesia románica de la Varga -hoy cementerio-, desde el borde del acantilado, hay una foto casi aérea de la vega donde aran sus campos Patones de Abajo, Torremocha y Torrelaguna; unos campos, por cierto, por los que anduvo a principios del siglo XII un tal Isidro Merlo, labrador antes que santo.

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Asados en horno de leña

- Cómo ir. Torremocha de Jarama dista 63 kilómetros de Madrid.Se va por la A-1 hasta el kilómetro 51, por la N-320 hasta Torrelaguna y finalmente por la M-102, desviándose a la derecha antes de llegar a Patones de Abajo. Hay autobuses de Continental Auto (teléfono 91 745 63 00) desde la plaza de Castilla.

- Visitas. Museo de la Agricultura (teléfono 91 843 16 96): abre todos los días, excepto lunes, de 11.00 a 14.00; la visita es guiada y cuesta 1,80 euros. Iglesia de San Pedro (teléfono 91 843 06 78): la enseña Luciano Vargas, que vive enfrente; entrada gratuita.

- Comer. La Mansiega (teléfono 91 843 04 81): cebollas rellenas, revueltos, carnes a la brasa y asados en horno de leña; precio medio, 25 euros. Asador San Isidro (teléfono 91 843 10 71): especialidad en asados y carnes rojas; 25 euros.

- Dormir. La Casa del Puente Colgante (teléfono 91 843 05 95): habitaciones con vistas al Jarama y acogedor salón con chimenea; doble, 70 euros. La Posada del Camino Real (Torrelaguna; teléfono 91 843 00 03): casona de hechuras hidalgas con patio porticado, restaurante, sauna y jacuzzi; doble, 65 euros.

- Comprar. En los talleres del polígono Torrearte puede adquirirse miel, pan biológico, jabón artesanal, cerámica, forja, papel reciclado, cestas de mimbre, esculturas de metal...

- Más información. Oficina de Turismo de Torremocha (Torrearte, 2; teléfono 91 843 16 96). Y en www.torremochadejarama.es.

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