Ibarretxe defiende la solidez de su Gabinete pese a las discrepancias de las últimas semanas

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, defendió ayer en el Parlamento la solidez de su Gobierno minimizando los desacuerdos que han ido surgiendo en las últimas semanas en materias como la ley de Suelo, la de Dependencia o la Y ferroviaria. Sobre esas cuestiones le interpeló el grupo socialista y su portavoz, José Antonio Pastor, sugirió que existe "una crisis" que el Gabinete oculta o una falta de control del lehendakari sobre sus consejeros, en referencia al acuerdo firmado con el ministerio por el titular de Asuntos Sociales, Javier Madrazo, sobre el desarrollo de la ley ...

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, defendió ayer en el Parlamento la solidez de su Gobierno minimizando los desacuerdos que han ido surgiendo en las últimas semanas en materias como la ley de Suelo, la de Dependencia o la Y ferroviaria. Sobre esas cuestiones le interpeló el grupo socialista y su portavoz, José Antonio Pastor, sugirió que existe "una crisis" que el Gabinete oculta o una falta de control del lehendakari sobre sus consejeros, en referencia al acuerdo firmado con el ministerio por el titular de Asuntos Sociales, Javier Madrazo, sobre el desarrollo de la ley de Dependencia, ahora enmendada a la totalidad en el Congreso de los Diputados por los nacionalistas.

El Gobierno había preparado toda una puesta en escena especial en la Cámara para responder a las tres preguntas planteadas por el portavoz del PSE-EE, José Antonio Pastor, al lehendakari, de tal modo que Ibarretxe respondería a una (ley de Dependencia), el hombre fuerte de EA en el Gobierno, Joseba Azkarraga, a otra (Y férrea), y el consejero de Vivienda, Javier Madrazo, de EB, a la última (ley de Suelo).

La aprobación anteayer en comisión del dictamen sobre la ley de Suelo llevó al PSE a retirar la pregunta relativa a ésta, y Madrazo se quedó sin intervención, pero Pastor no desaprovechó la oportunidad de señalar que ese reparto a tres bandas de las respuestas evidencia la necesidad que tiene el Ejecutivo "de demostrar algo", una unidad de criterios que, a su juicio, no existe en su seno.

Pastor puso al lehendakari ante dos posibilidades: o tiene instalada una especie de crisis de Gobierno que prefiere ocultar "bajo las alfombras de Ajuria Enea", o no controla lo que hacen algunos de sus consejeros. Se refería en concreto al acuerdo que Madrazo, firmó en abril con el ministro de Asuntos Sociales, Jesús Caldera, sobre la ley de Dependencia, que ahora han enmendado a la totalidad en el Congreso de los Diputados el grupo del PNV y la única representante de EA.

El portavoz socialista señaló que el Gabinete asumió a través de Madrazo un compromiso con el Ejecutivo central que ahora dice no estar dispuesto a cumplir y consideró que "ha hecho el ridículo" con esa actuación y posterior marcha atrás.

El lehendakari defendió que su equipo tiene fortaleza y coherencia internas y contrapuso su permanencia al estallido del tripartito catalán dirigido por los socialistas. También agradeció solemnemente a los tres grupos parlamentarios que le apoyan "la lealtad" recíproca con la que trabajan, en claro contraste con el torpedeo que ha sufrido desde las filas del PNV el proyecto de ley de Suelo de Madrazo hasta el último momento.

Competencias

El lehendakari expresó a Pastor su convencimiento de que habrá un acuerdo con el Ejecutivo socialista sobre la ley de Dependencia siempre que ésta respete los marcos competenciales vascos. Pastor rechazó que ese respeto esté en duda y leyó el artículo 2 del proyecto de ley, que reconoce "escrupulosamente" lo reclamado por Ibarretxe.

Ese artículo menciona las competencias exclusivas de las comunidades autónomas y el derecho de éstas a disponer de su propio catálogo de servicios, por encima del que establezca la ley. "¿Dónde está la invasión de competencias?", interrogó Pastor a Ibarretxe. "Lo que a ustedes les preocupa es el artículo 1, que reconoce las prestaciones como un derecho subjetivo nuevo, universal y exigible, y no como una subvención graciable", añadió el portavoz socialista, en una acusación que Ibarretxe no negó, más allá de su negativa a "aceptar lecciones de nadie" en materia de prestaciones sociales.

La consideración de los servicios sociales como derecho subjetivo y universal es un planteamiento que defienden en la Cámara los socialistas, y que cuenta con la resistencia del Gobierno y del PP.

Pastor se refirió también a las reticencias nacionalistas sobre la "suficiencia financiera" de la ley y argumentó que también las comunidades autónomas, las diputaciones y los ayuntamientos son Estado, por lo que todas las administraciones son corresponsables en su financiación.

Azkarraga, mientras, avisó de que esas respuestas a tres voces a preguntas formuladas al lehendakari se repetirán en el futuro y acusó al líder socialista, Patxi López de no participar en los debates en la Cámara.