Azkarate acusa al PSE de intentar "arriconar" al 'lehendakari'
La portavoz del Gobierno vasco y consejera de Cultura, Miren Azkarate, considera que el PSE-EE intenta "arrinconar y quitar espacio" a Ibarretxe cuando propugna que corresponde a los partidos protagonizar la normalización política en Euskadi y afirma que el lehendakari "no tiene sitio en el proceso". En una entrevista publicada ayer por Deia, Azkarate verbaliza un análisis compartido por el entorno del lehendakari y la dirección del PNV: el interés de los socialistas vascos de minimizar el protagonismo de Ibarretxe en la etapa abierta con el alto el fuego de ETA, sobre tod...
La portavoz del Gobierno vasco y consejera de Cultura, Miren Azkarate, considera que el PSE-EE intenta "arrinconar y quitar espacio" a Ibarretxe cuando propugna que corresponde a los partidos protagonizar la normalización política en Euskadi y afirma que el lehendakari "no tiene sitio en el proceso". En una entrevista publicada ayer por Deia, Azkarate verbaliza un análisis compartido por el entorno del lehendakari y la dirección del PNV: el interés de los socialistas vascos de minimizar el protagonismo de Ibarretxe en la etapa abierta con el alto el fuego de ETA, sobre todo en la futura mesa de partidos.
Azkarate critica que "en distintos momentos y en distintas declaraciones de dirigentes socialistas, tanto del PSE como de Madrid, se observa un intento de hacer ver que el lehendakari está amortizado y enfrentado a su partido". "Eso no es así", asegura la consejera de Cultura, que se remite a las declaraciones de Ibarretxe y del presidente del PNV, Josu Jon Imaz. El lehendakari, añade, "sabe muy bien dónde está, qué es lo que quiere y cuál es la apuesta que tenemos entre manos". Azkarate sostiene, en sintonía con el discurso de Ibarretxe, que en el momento presente los partidos tienen "un gran protagonismo", pero reclama también un papel para las instituciones. "No hay que plantear este proceso en términos de rivalidad".
Por otro lado, se felicita de que el PSE haya terminado aceptando mantener un encuentro oficial con Batasuna y asumiendo que el diálogo del Gobierno con ETA y la negociación política vayan en paralelo, "aunque luego [los socialistas] intenten despistar un poco acusando al Gobierno vasco de querer mezclar la paz y la política".