La Comisión Europea sitúa a Andalucía a la cabeza en tecnología digital aplicada a la salud

La comisaria europea de la Sociedad de la Información, la luxemburguesa Viviane Reding, aseguró ayer que Andalucía "es una de las regiones punteras" de la Unión Europea (UE) en desarrollo y aplicación de tecnologías de la información en el campo de la salud. Reding, que inauguró ayer en Málaga la segunda conferencia de alto nivel E-Health sobre salud digital, anunció que la Comisión prepara una recomendación para que los Estados miembros hagan compatibles entre sí sus distintos soportes tecnológicos aplicados a la salud y a la gestión sanitaria.

Andalucía ha emprendido varias iniciativa...

La comisaria europea de la Sociedad de la Información, la luxemburguesa Viviane Reding, aseguró ayer que Andalucía "es una de las regiones punteras" de la Unión Europea (UE) en desarrollo y aplicación de tecnologías de la información en el campo de la salud. Reding, que inauguró ayer en Málaga la segunda conferencia de alto nivel E-Health sobre salud digital, anunció que la Comisión prepara una recomendación para que los Estados miembros hagan compatibles entre sí sus distintos soportes tecnológicos aplicados a la salud y a la gestión sanitaria.

Andalucía ha emprendido varias iniciativas de salud electrónica, que tienen su núcleo central en el programa informático Diraya. Esta base de datos, que contiene las referencias personales y clínicas de los cerca de ocho millones de personas que reciben asistencia sanitaria pública, permite que exista la historia clínica única -que comprende al 66% de la población- la petición de cita por Internet con el médico de atención primaria o la receta electrónica.

Precisamente, la prescripción digital de medicamentos fue ayer objeto de una demostración a la que asistieron Viviane Reding y la consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero. Esta innovación -que evita la receta en papel ya que la prescripción se carga en el memoria de la tarjeta sanitaria- permitirá que los pacientes crónicos no tengan que acudir periódicamente al médico de cabecera con el único fin de que les extienda una receta para continuar sus tratamientos. Se estima que esto descongestionará en un 20% los centros de salud. Otras aplicaciones que se destacaron ayer fueron los centros únicos de información al ciudadano Salud Responde o la Biblioteca Virtual, que dará la posibilidad a los facultativos de acceder vía Internet a publicaciones especializadas.

En el campo de la tecnología digital aplicada a la asistencia médica, el pasado martes la comisaria Reding visitó en Granada el Complejo Multifuncional Avanzado de Simulación e Innovación Tecnológica (CMAT). Este centro, gestionado por la fundación Iavante, ha formado a 3.080 profesionales sanitarios desde 2004 y cuenta, entre otros medios, con un maniquí robotizado que simula casos clínicos críticos para entrenar a médicos y enfermeros.

Intercambio de datos

"Interoperabilidad" fue la palabra más repetida ayer en el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga, donde se celebrará la conferencia E-Health hasta el próximo viernes. Este término informático define la posibilidad de que sistemas heterogéneos -como los sistemas autonómicos de salud- puedan intercambiar procesos o datos.

En el campo de la gestión sanitaria, esto se traduciría, por ejemplo, en que un ciudadano británico a quien su médico de cabecera le ha prescrito un tratamiento, pudiera obtenerlo, mediante una receta electrónica, en una farmacia de la Costa del Sol. O también que un médico de urgencias de un hospital de Logroño pueda acceder automáticamente por un terminal de ordenador a la historia clínica de un paciente de Cádiz que ha sufrido un accidente en La Rioja, porque los sistemas digitales de salud autonómicos aún no están conectados entre sí, al contrario de lo que ocurre en países como Suecia, Dinamarca o Canadá.

La ministra de Sanidad, Elena Salgado, afirmó que las nuevas tecnologías sanitarias "pueden ayudar a agilizar los trámites burocráticos a la hora de cobrar a terceros países la factura por la atención de ciudadanos extranjeros no residentes en España, pero que han requerido de una asistencia sanitaria en el sistema público español.