El Congreso limitará la capacidad de Andalucía sobre el Guadalquivir

El Grupo Parlamentario Socialista tiene ya en cartera los cambios que promoverá en el proyecto de nuevo Estatuto de Andalucía que ayer entró en el Congreso de los Diputados. La unidad de la nación española se incluirá en el texto y además se corregirá el artículo por el que la comunidad autónoma asume la competencia exclusiva sobre el Guadalquivir. Los legisladores andaluces han obviado que la cuenca del río también se extiende por otras tres comunidades: Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia.

Con la entrega ayer en el Registro del Congreso de los Diputados del proyecto de nuevo Esta...

El Grupo Parlamentario Socialista tiene ya en cartera los cambios que promoverá en el proyecto de nuevo Estatuto de Andalucía que ayer entró en el Congreso de los Diputados. La unidad de la nación española se incluirá en el texto y además se corregirá el artículo por el que la comunidad autónoma asume la competencia exclusiva sobre el Guadalquivir. Los legisladores andaluces han obviado que la cuenca del río también se extiende por otras tres comunidades: Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia.

La presidenta del Parlamento autónomo entrega el nuevo texto en la Cámara baja

Con la entrega ayer en el Registro del Congreso de los Diputados del proyecto de nuevo Estatuto andaluz, aprobado por la Cámara autónoma el dos de mayo, empezó la andadura de este texto por las Cortes Generales. La presidenta del Parlamento de Andalucía, María del Mar Moreno, se entrevistó con el Presidente del Congreso, Manuel Marín, ambos militantes socialistas, para intercambiar puntos de vista sobre el devenir del texto. Moreno no se apartó de su papel institucional, y se limitó a señalar las bondades del consenso entre partidos políticos cuando fue preguntada si preveía que el PP pudiera sumarse ahora al texto, ya que no lo había hecho durante la tramitación en Andalucía.

De momento, la negociación será entre los propios socialistas, es decir, entre los dirigentes andaluces y el Grupo Parlamentario del Congreso. Nada tendrá que ver este diálogo y negociación con las largas transacciones, no siempre con final feliz, entre los representantes de los distintos partidos políticos en torno al Estatuto de Cataluña, que ayer fue definitivamente aprobado en el Senado.

Pero los socialistas ya están trabajando en las modificaciones que introducirán en el texto andaluz, y sus líneas generales estarán perfiladas para el próximo día 23 de mayo, cuando el Pleno del Congreso tome en consideración el texto, que tiene forma de proposición de ley. Los cambios, no obstante, se introducirán en las fases de Ponencia y Comisión, pero ya será en el mes de septiembre.

Los cambios y matizaciones se producirán en torno a las competencias exclusivas que el texto propone para Andalucía, en función del artículo 150.2 de la Constitución, por el que el Estado transfiere o delega competencias que hasta ahora eran suyas. Ya es seguro que se modificará la redacción de la parte referida a la inclusión como competencia exclusiva de la Cuenca Hidrográfica del Guadalquivir. Ésta fue recomendada por el Consejo Consultivo de Andalucía, por el hecho incontestable de que el río Guadalquivir discurre en más del 90% por Andalucía y "casi la práctica totalidad de sus usuarios son andaluces".

En el Grupo Parlamentario Socialista se propondrá otra redacción toda vez que no se puede tener la competencia exclusiva cuando la cuenca del río se extiende, aunque en una medida pequeña, por Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia.

Lo cierto es que el Gobierno central trabaja en un anteproyecto de ley para modificar los órganos de gestión del agua, a petición del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda. La Ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, lo anunció ayer en Carranque (Toledo) en un acto con el presidente castellano-manchego, en el que explicó que la reforma pretende que los órganos de gestión del agua tengan capacidad de cogestión. Barreda mantiene esta reivindicación de antiguo para que las comunidades autónomas, desde luego la suya, tengan voz en la toma de decisiones de las confederaciones hidrográficas.

No habrá sorpresas ni disgustos, en principio, toda vez que las líneas generales de los cambios, junto al calendario, se ha encauzado en una reunión discreta celebrada el 26 de abril. En la misma estuvo el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Francisco Caamaño, consolidado como figura relevante en la negociación estatutaria tras su intervención indispensable en el Estatuto de Cataluña. Junto a él, y como impulsor de la reunión, estuvo Alfonso Perales, responsable de Política Institucional y Autonómica del PSOE, y el Portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Diego López Garrido. Por la delegación andaluza asistieron los dirigentes Luis Pizarro, Gaspar Zarrías y Manuel Gracia.

La discusión sobre la competencia del Guadalquivir no será baladí, por la potente carga simbólica y de identidad para Andalucía que tiene el río. Puertos y aeropuertos de interés general, servicio meteorológico, Tráfico y Seguridad Vial, y museos, archivos y bibliotecas, son las otras competencias exclusivas que el proyecto de Estatuto recoge para Andalucía. Y sobre las que, en principio, no habrá problema, aunque se hará un repaso general para que no haya atisbo de inconstitucionalidad o el Estado se quede inerme en algún aspecto de estas competencias y no lo considere adecuado, según las fuentes consultadas del Grupo Socialista.

No obstante, López Garrido, aseguró que el Estatuto aprobado en el Parlamento andaluz por el PSOE e IU, "no será desnaturalizado". Los socialistas incluirán en el preámbulo y en el artículo 1 del texto la referencia a la unidad de la nación española, para precisar que la denominación para Andalucía de "realidad nacional" es compatible con la unidad de España. Aún así, el PP continuará con el no al Estatuto.