Dos grandes proyectos en Vizcaya y Guipúzcoa compiten por atraer la producción audiovisual

La pugna histórica entre Guipúzcoa y Vizcaya por convertirse en sede de grandes proyectos ha alcanzado el terreno de lo audiovisual: en ambas provincias se está trabajando en la creación de polígonos vinculados al sector que, según algunas voces, entran en colisión directa. El Zinealdea, promovido por la agencia de desarrollo comarcal Oarsoaldea en Oiartzun, tiene hasta el 18 de abril para cerrar una operación que suma retrasos y ha perdido empresas por el camino. De lo contrario perderá la reserva de suelo firmada con Sprilur. El Irudi Park bilbaíno, una propuesta del Gobierno en fase germina...

La pugna histórica entre Guipúzcoa y Vizcaya por convertirse en sede de grandes proyectos ha alcanzado el terreno de lo audiovisual: en ambas provincias se está trabajando en la creación de polígonos vinculados al sector que, según algunas voces, entran en colisión directa. El Zinealdea, promovido por la agencia de desarrollo comarcal Oarsoaldea en Oiartzun, tiene hasta el 18 de abril para cerrar una operación que suma retrasos y ha perdido empresas por el camino. De lo contrario perderá la reserva de suelo firmada con Sprilur. El Irudi Park bilbaíno, una propuesta del Gobierno en fase germinal, cuenta con un informe favorable de impacto económico y el interés de 23 firmas.

La primera apuesta firme por la industria audiovisual se produjo en Guipúzcoa, territorio de gran tradición en este ámbito. Oarsoaldea planteó en 2000 su intención de construir un área cinematográfica que concentrase empresas auxiliares a la producción -sonido, iluminación, etcétera- y albergase una escuela. En 2003, firmó una reserva de 30.800 metros cuadrados de suelo en el polígono Lintziringaina con la Sprilur, la sociedad industrial del Gobierno vasco. El proyecto se ha topado con "más dificultades de las previstas" y acumula un importante retraso, según confirma el gerente de Oarsoaldea, Fernando Nebreda.

"Al inicio optamos por un promotor único que exigía modificaciones urbanísticas, pero Sprilur no lo aceptó y tuvimos que reorientar el proyecto", justifica. Por el camino, algunas de las empresas que habían mostrado su interés por instalarse en Oiartzun fueron descolgándose del proyecto. Unas, al ver que no avanzaba; otras, según fuentes de este sector, que engloba a 446 empresas y emplea a unas 3.300 personas, al conocer que en Bilbao también se proyecta un parque alrededor de la nueva sede de EITB en la antigua Feria de Muestras. "La realidad es la que es. Ojalá hubiera sitio en Euskadi para 200 proyectos audiovisuales, pero no es el caso", apuntan dichas fuentes.

Encuesta

Los promotores de Zinealdea, que afirman tener una cartera de 15 empresas interesadas en instalarse en Lintziringaina, disponen de mes y medio para ultimar su creación en un polígono de 44.000 metros cuadrados en el que ya trabajan empresas de otros sectores. En caso contrario, Sprilur cancelará la reserva de suelo para dedicarla a otras actividades, según confirma su presidente, Antton Zubiaurre: "Todo está preparado, lo que hace falta es que tengan un verdadero proyecto". Nebreda replica: "Sabemos que tenemos poco tiempo, pero vamos a luchar hasta el final para que esto salga. Tiene el 99% de posibilidades de prosperar si no hay interferencias externas".

Sobre la situación de este proyecto han planeado todo tipo de sombras. Fuentes relacionadas con el sector en Guipúzcoa sostienen que con la operación del Irudi Park se pretende hurtar a este territorio su entrada en un sector económico pujante. "Han copiado el proyecto y ahora pretenden llevarse empresas de aquí a Bilbao. No es la primera vez que ocurre. La batalla para lograr que el centro de testado masivo de fármacos Biobide se quedara en Guipúzcoa fue también dura".

Una encuesta impulsada por Eiken, el cluster audiovisual vasco, para conocer la postura del sector ante la creación del parque bilbaíno demuestra que se está mirando mucho más allá de Vizcaya. El sondeo se ha realizado entre 59 firmas: las 32 socias guipuzcoanas, vizcaínas, alavesas y navarras de Eiken y otras compañías externas de Vizcaya. Un total de 23 han mostrado gran interés por instalarse en parte de los 7.500 metros cuadrados del pabellón siete de la Feria de Muestras a un precio de entre ocho y doce euros el metro cuadrado, y estiman que necesitarían en total 4.025 metros. Las exigencias de espacio ascenderían a 8.448 mestros cuadrados si se suman las firmas con medio o bajo interés.

Eiken encargó además un informe que estima en 31 millones de euros de facturación anual y 300 empleos directos el impacto estratégico que supondría la creación de este parque audiovisual, concebido para crear sinergias y mejorar la competitividad del sector. El estudio sitúa al Irudi Park en un mapa español de ciudades de la imagen existentes o en proyecto en el que no figura el Zinealdea. Desde Guipúzcoa se mira con cautela esta iniciativa, porque sus intereses pueden chocar con el proyecto estratégico DonostiMedia para conformar una ciudad de la imagen conjugando distintas iniciativas, desde el Centro Internacional de Cultura Contemporánea, al que tampoco se menciona, hasta la Film Comission donostiarra, la Escuela de Cine y Vídeo de Andoain, EITB y Zinealdea.