El sector se queja de la falta de salida laboral al volver a España

¿Y ahora qué? Ésa es la frase que la mayoría de los 1.400 cooperantes españoles repite una vez que regresa a casa tras varios años en el extranjero.

Muchos de los que trabajan en este colectivo se quejan de las dificultades que encuentran a su vuelta a España para encontrar algún trabajo. "Has hecho un trabajo profesional, pero cuando regresas estás fuera del mercado. Todo el mundo te dice lo bueno que eres, pero es difícil meter la cabeza en la empresa privada, porque no tienes contactos y tu experiencia se limita a países extranjeros", explica Javier Verdes, economista, de 39 años, qu...

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¿Y ahora qué? Ésa es la frase que la mayoría de los 1.400 cooperantes españoles repite una vez que regresa a casa tras varios años en el extranjero.

Muchos de los que trabajan en este colectivo se quejan de las dificultades que encuentran a su vuelta a España para encontrar algún trabajo. "Has hecho un trabajo profesional, pero cuando regresas estás fuera del mercado. Todo el mundo te dice lo bueno que eres, pero es difícil meter la cabeza en la empresa privada, porque no tienes contactos y tu experiencia se limita a países extranjeros", explica Javier Verdes, economista, de 39 años, que trabajó en la ONG Acción Contra el Hambre durante cinco años en cuatro países distintos.

El perfil del cooperante español es el de un joven de 30 años, con estudios universitarios y que suele marcharse a algún país de Latinoamérica. Ecuador es el que reúne mayor número de cooperantes españoles (101), según los datos de un informe elaborado por la Asociación Profesional de Cooperantes en junio de 2005. Un 54% de los cooperantes españoles en el extranjero están contratados por ONG, un 16% trabaja para la AECI, Naciones Unidas emplea al 10% y la Unión Europea a un 6%.

El mismo informe asegura que la cifra de hombres y mujeres cooperantes en el extranjero es similar, aunque señala que los primeros suelen marchar para hacer labores de ayuda humanitaria, mientras que las mujeres suelen trabajar en el campo de la cooperación al desarrollo.

El informe define como cooperante profesional a todo español que trabaja en tareas de cooperación al desarrollo o ayuda humanitaria en países receptores de ayuda, y excluye de la definición a los funcionarios con relación administrativa, voluntarios, lectores, brigadistas, trabajadores en cooperación cultural y comercial, religiosos y misioneros.

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