Descienden un 25% las llegadas en patera a las costas españolas

Las cifras de la inmigración clandestina hacia España arrojan descensos importantes. Durante el año recién terminado han llegado menos pateras y también menos extranjeros indocumentados. Según el balance de 2005 dado a conocer ayer por la Secretaría de Estado de Inmigración y Emigración, arribaron a las costas españolas 173 embarcaciones y 3.894 inmigrantes menos que el año anterior, lo que representa un descenso del 23% y el 25%, respectivamente.

Por segundo año consecutivo, las cifras de indocumentados llegados en patera confirman un descenso importante (7.500 inmigrantes menos en los...

Las cifras de la inmigración clandestina hacia España arrojan descensos importantes. Durante el año recién terminado han llegado menos pateras y también menos extranjeros indocumentados. Según el balance de 2005 dado a conocer ayer por la Secretaría de Estado de Inmigración y Emigración, arribaron a las costas españolas 173 embarcaciones y 3.894 inmigrantes menos que el año anterior, lo que representa un descenso del 23% y el 25%, respectivamente.

Por segundo año consecutivo, las cifras de indocumentados llegados en patera confirman un descenso importante (7.500 inmigrantes menos en los últimos 24 meses), que la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, calificó ayer como "muy alentador" y que atribuyó al refuerzo de los medios materiales y humanos dedicados a las tareas de vigilancia, a la lucha contra las mafias de tráfico de personas y a la cooperación entre Madrid y Rabat. Entre enero y diciembre de 2005 fueron interceptadas 567 pateras, y las fuerzas de seguridad detuvieron a 11.781 personas.

Entre los datos más positivos figura el descenso del 86% de número de naufragios con respecto al año anterior (12 menos), así como la reducción en un 70% del número de cadáveres provocados por éstos (57 menos). También descienden las personas desaparecidas, en un 37%, lo que supone 22 menos que en 2004. Los sin papeles rescatados descendieron de 339 a 329.

Los datos revelan una reducción de la presión migratoria irregular hacia Canarias, donde se interceptó un 26% menos de embarcaciones. Según Rumí, los datos de las islas tienen gran importancia porque la mayoría de la inmigración clandestina con ese destino es subsahariana, de países con los que no hay acuerdos de repatriación. En el litoral andaluz, Ceuta y Melilla se detectaron 348 pateras (un 22% menos) y se detuvo a 7.066 ocupantes (un 2% menos).

Destaca el incremento de la presión migratoria en patera registrada en Melilla, Gran Canaria o Tenerife. En la ciudad autónoma fueron detenidos 188 sin papeles, frente a los ocho de 2004; en Gran Canaria, 1.347, casi 1.000 más que en 2004; y en Tenerife se detuvo a 768 extranjeros, frente a los 114 del año anterior. La provincia con más llegadas de barquillas en 2005 fue Almería (124), aunque fue en Granada donde se detuvo a mayor número de ocupantes (2.678).