Técnicos de Bienestar Social evalúan a un niño que intentó apuñalar a su madre

El niño de seis años cuya tutela ha asumido Bienestar Social a instancias de su madre por padecer "episodios de violencia" contra ella permanecerá en una institución de la consejería hasta que sea evaluado por profesionales de salud mental y psicólogos que "tendrán que dar un diagnóstico y tomar una decisión definitiva".

La consejera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, afirmó ayer que existen situaciones familiares "muy complejas" y "muy duras" detrás de casos como el de este niño de Alicante sobre el que la Generalitat ha asumido la guarda voluntaria después de atender la solicitud ...

El niño de seis años cuya tutela ha asumido Bienestar Social a instancias de su madre por padecer "episodios de violencia" contra ella permanecerá en una institución de la consejería hasta que sea evaluado por profesionales de salud mental y psicólogos que "tendrán que dar un diagnóstico y tomar una decisión definitiva".

La consejera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, afirmó ayer que existen situaciones familiares "muy complejas" y "muy duras" detrás de casos como el de este niño de Alicante sobre el que la Generalitat ha asumido la guarda voluntaria después de atender la solicitud de la madre y los informes de la Fiscalía y de los servicios sociales.

De Miguel, que realizó estas declaraciones en los pasillos de las Cortes, explicó que "los informes de la fiscalía y la situación compleja que se ha producido nos hacen tomar esta medida [el ingreso] que la propia madre también reclama".

La madre, que se encuentra embarazada, acudió el miércoles a la Fiscalía de Alicante y denunció que su hijo le maltrata sistemáticamente al pegarle patadas en el vientre. Incluso en uno de los arrebatos del menor intentó el viernes acuchillar a su madre, que tiene una hija de siete años, según publicó ayer el diario Información.

La denunciante solicitó ayuda para alojar al niño en un centro donde puedan atenderle temporalmente y ayudar a reeducarlo ante la situación límite a la que ha llegado la convivencia doméstica.

El miércoles por la tarde el menor fue remitido a la dirección territorial de la consejería de Bienestar Social para que los técnicos se hicieran cargo del niño que finalmente ha pasado a estar bajo la responsabilidad del Consell.

Especialistas que trabajan con menores conflictivos han advertido que cada vez resulta más frecuente la existencia de chavales que presentan conductas agresivas hacia sus padres y requieren tratamiento e incluso internamiento en centros especializados. Sin embargo, suele tratarse de adolescentes o preadolescentes difíciles de controlar, no de niños tan pequeños.