¡Cállese, señor González (Pons)!

Por mucho que algunos se empeñen, es tan innegable que catalanes y valencianos compartimos una misma lengua, como que ambos pueblos hemos vivido conjuntamente hechos históricos y compartimos nexos culturales. Por más que ahora tengamos proyectos políticos diferentes, tan legítimo es defender nuestros lazos comunes como remarcar nuestros hechos diferenciales. Digo esto a propósito de la descabellada intervención, el domingo pasado, del conseller González Pons, en la que mostró su ofendido honor patrio por los hechos acaecidos la víspera en los preludios de un partido de fútbol televisado...

Por mucho que algunos se empeñen, es tan innegable que catalanes y valencianos compartimos una misma lengua, como que ambos pueblos hemos vivido conjuntamente hechos históricos y compartimos nexos culturales. Por más que ahora tengamos proyectos políticos diferentes, tan legítimo es defender nuestros lazos comunes como remarcar nuestros hechos diferenciales. Digo esto a propósito de la descabellada intervención, el domingo pasado, del conseller González Pons, en la que mostró su ofendido honor patrio por los hechos acaecidos la víspera en los preludios de un partido de fútbol televisado. El eje argumental: Països Catalans-Estatut-Maragall-Zapatero, trazado por el inefable conseller, me recuerda a aquel discurso franquista de "la conspiración judeo-masónica, el comunismo internacional y la pertinaz sequía...". No busquen agentes externos a los que culpar de la bancarrota de la Generalitat. Su política irrita a bastantes valencianos más que los hechos del Nou Camp. Así pues, parafraseando a su querido líder: modérese o ¡Cállese, señor González.