La Generalitat elevará en un 50% las ayudas a los 'casals' en el extranjero

La Generalitat aumentará el 50% las subvenciones directas a los 108 casals distribuidos por todo el mundo. Estas ayudas sumarán 1,5 millones de euros el año próximos. Además, se destinará otro millón de euros a becas de jóvenes extranjeros para estudiar en Cataluña y a asegurar la llegada de TV-3 a Latinoamérica, además de la emisión de los partidos del FC Barcelona en directo, según el secretario de Cooperación Exterior, Albert Royo.

Las subvenciones directas se destinarán en parte a la reforma de las sedes, a menudo edificios modernistas de destacada arquitectura. Es el caso de...

La Generalitat aumentará el 50% las subvenciones directas a los 108 casals distribuidos por todo el mundo. Estas ayudas sumarán 1,5 millones de euros el año próximos. Además, se destinará otro millón de euros a becas de jóvenes extranjeros para estudiar en Cataluña y a asegurar la llegada de TV-3 a Latinoamérica, además de la emisión de los partidos del FC Barcelona en directo, según el secretario de Cooperación Exterior, Albert Royo.

Las subvenciones directas se destinarán en parte a la reforma de las sedes, a menudo edificios modernistas de destacada arquitectura. Es el caso del edificio que alberga el casal de Buenos Aires, que se inaugurará en el Encuentro Cultural de Casales Catalanes del Cono Sur de América, que se celebrará del 27 al 30 de octubre. En el evento, que reunirá a unas 700 personas de más de 30 comunidades, el Gobierno catalán anunciará su nueva política dirigida a las comunidades catalanas en el exterior.

Aunque en Latinoamérica es necesaria una reactivación, en otros lugares se ha advertido un creciente interés por la cultura catalana. En el último año se han reconocido asociaciones en San Sebastián, Berlín (Alemania) y San Diego (EE UU), a la vez que se están gestando otras comunidades en Nueva York (EEUU), Shanghai (China), Poznan (Polonia) y Londres (Inglaterra). Un ejemplo de la nueva realidad del casal catalán es el de Osaka (Japón), formado en un 70% por japoneses, un 20% europeos y el 10% restante por catalanes.

En todos los casos, la intención de la Generalitat es fortalecer los vínculos para obtener una mayor influencia en sus respectivos países.

Muchos casals nacieron por el empuje de personas que sufrieron el exilio durante la Guerra Civil y la dictadura. Sin embargo, la actividad que había antaño en el seno de estas asociaciones ha ido perdiendo fuerza, hasta el punto de que muchas han desaparecido. Ello sin contar los "casals durmientes", al menos una decena, que pese a continuar constituidos hace tiempo que no dan señales de vida.

Lejos del importante movimiento cultural que había en tiempos adversos, algunos casals se han convertido en un espacio de reunión de personas únicamente de edad avanzada. Muchos de los antiguos miembros han muerto y a sus hijos y nietos "nos les atrae la idea de formar parte del casal", explica el secretario de Cooperación Exterior. Para impulsar estos centros, la Generalitat y el Consejo Interuniversitario de Cataluña convocarán a finales de este mes unas becas dirigidas a universitarios catalanes, con el fin de enviar a ocho jóvenes durante nueve meses a las comunidades que lo hayan solicitado.