El Movimiento pro Amnistía pide el 'estatus político' para los presos etarras

El Movimiento pro Amnistía, heredero de las Gestoras ilegalizadas por el juez Baltasar Garzón, logró reunir ayer en San Sebastián a varios cientos de personas, que pidieron bajo la lluvia la concesión "del estatus político" y la "amnistía a los presos de ETA". Entre ellos estaban secretario general de LAB, Rafael Díez Usabiaga, que debe declarar hoy en la Audiencia Nacional por su presunta integración en ETA; el dirigente de Batasuna Juan Joxe Petrikorena, imputado en la investigación judicial abierta contra EHAK, y el ex dirigente de la organización terrorista Eugenio Etxebeste, Antxon...

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El Movimiento pro Amnistía, heredero de las Gestoras ilegalizadas por el juez Baltasar Garzón, logró reunir ayer en San Sebastián a varios cientos de personas, que pidieron bajo la lluvia la concesión "del estatus político" y la "amnistía a los presos de ETA". Entre ellos estaban secretario general de LAB, Rafael Díez Usabiaga, que debe declarar hoy en la Audiencia Nacional por su presunta integración en ETA; el dirigente de Batasuna Juan Joxe Petrikorena, imputado en la investigación judicial abierta contra EHAK, y el ex dirigente de la organización terrorista Eugenio Etxebeste, Antxon.

La manifestación, precedida por una pancarta con el lema en euskera Estatus político. Solución ahora. Amnistía y libertad, partió del Bulevar pasadas las 13.30 y recorrió durante unos veinte minutos las principales calles del centro de la ciudad, de forma totalmente pacífica, aunque a golpe de consignas en euskera a favor de la lucha (La lucha es el único camino, Dale hasta ganar) y de la amnistía (Paz, no sin amnistía). A su llegada al Bulevar, un portavoz del Movimiento pro Amnistía aseguró a su público que los presos de ETA no serán "moneda de cambio en el proceso de paz", mientras denunciaba la política penitenciaria del Gobierno y la "represión".

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La movilización se desarrolló pese a que el PP y la Asociación de Víctimas del Terrorismo habían pedido al consejero vasco de Interior, Javier Balza, su prohibición. La formación adujo que si no impedía el desarrollo de la manifestación, el Gobierno vasco iba a convertirse en "cómplice y colaborador de un fraude de ley". La ATV lo hizo por otros motivos. Vio en esta marcha un "insulto" y una "humillación" a las víctimas.

[Un presunto etarra se dio el miércoles a la fuga tras sufrir un accidente en Champagnac-le-vieux, en el centro de Francia, cuando el vehículo que conducía colisionó contra otro del servicio estatal de Correos, según informó ayer Le Journal du Dimanche. En el interior del coche se halló documentación en euskera y varias placas de matrículas falsas].

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