La fotografía acapara las preferencias

De las cerca de un centenar de obras presentadas en las tres ediciones del Certamen de Creación Artística Universitaria, las dos terceras partes se basan en técnicas fotográficas. Que la fotografía sea el género más cultivado por estos 40 artistas tiene una sencilla explicación: la mayoría de los participantes en los certámenes proceden de la Facultad de Ciencias de la Comunicación y más específicamente de la rama de Comunicación Audiovisual.

"El predominio del uso de la fotografía frente al resto de técnicas propias de las artes plásticas se justifica en que los alumnos de Comunicación...

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De las cerca de un centenar de obras presentadas en las tres ediciones del Certamen de Creación Artística Universitaria, las dos terceras partes se basan en técnicas fotográficas. Que la fotografía sea el género más cultivado por estos 40 artistas tiene una sencilla explicación: la mayoría de los participantes en los certámenes proceden de la Facultad de Ciencias de la Comunicación y más específicamente de la rama de Comunicación Audiovisual.

"El predominio del uso de la fotografía frente al resto de técnicas propias de las artes plásticas se justifica en que los alumnos de Comunicación Audiovisual tienen en la imagen y en su tratamiento uno de los pilares básicos de sus estudios, al igual que cuentan con asignaturas dedicadas a la Historia del Arte en sus tendencias y lenguajes contemporáneos", explica Juan Francisco Rueda, organizador de la exposición.

Junto a Ciencias de la Comunicación, Historia del Arte y Filosofía son las licenciaturas de procedencia de gran parte del resto de los artistas.

En esta tercera edición del certamen, además de la obra de Noelia García, han sido seleccionadas y adquiridas obras de José Luis Puche y Aranzazu Ruiz.

La obra Codice Canone, de Luis Puche ha sido adquirida por la Facultad de Filosofía y Letras. Esta obra se puede considerar como autobiográfica, ya que el artista ha empleado en su elaboración los tickets que fue recolectando durante su trabajo como cajero, resguardos de compra que son como una especie de diario del trato que mantuvo con cada uno de los clientes que atendió y que ha empleado para lanzar una crítica al furor consumista que asuela a la sociedad actual.

Con Salón Málaga, también adquirida para la colección de Filosofía y Letras, Aranzazu Ruiz refleja mediante el fotomontaje los vacíos y llenos de las ciudades, proceso en el que a veces se desvirtúa la realidad.

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