Ferry's pretende despedir a 306 personas, el 60% de su plantilla

Los planes de Ferry's de recortar plantilla se convirtieron ayer en cifras: la textil pretende despedir a 306 trabajadores, el 60% de su plantilla. Del total, quedarían afectados el 70% de los empleados del centro de Canals, que suman 260 y los casi 50 restantes son de Benifaió.

CC OO-PV y UGT-PV expresaron su rechazo al recorte y en general a la intención de la dirección de la empresa. Tanto el secretario de Acción Sindical de Fia-UGT-PV, Ramón Morales, como el secretario general de Fiteqa-CC OO-PV, Vicente Rodríguez, explicaron que durante el encuentro trasladaron su oposición a un pl...

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Los planes de Ferry's de recortar plantilla se convirtieron ayer en cifras: la textil pretende despedir a 306 trabajadores, el 60% de su plantilla. Del total, quedarían afectados el 70% de los empleados del centro de Canals, que suman 260 y los casi 50 restantes son de Benifaió.

CC OO-PV y UGT-PV expresaron su rechazo al recorte y en general a la intención de la dirección de la empresa. Tanto el secretario de Acción Sindical de Fia-UGT-PV, Ramón Morales, como el secretario general de Fiteqa-CC OO-PV, Vicente Rodríguez, explicaron que durante el encuentro trasladaron su oposición a un plan que dibuja un modelo de futuro para una empresa que tras once años de esfuerzo va camino a convertirse en una firma logística y comercial. Los sindicatos se oponen al desmantelamiento industrial de la firma.

Con todo, las mismas fuentes explicaron que la viabilidad de Ferry's está supeditada a resolver la deuda histórica. Por ello, la quita (reducción de deuda) y la recalificación de terrenos en Canals son básicos. En la reunión se pidió al juez que agilice el proceso de consulta con las distintas partes afectadas -sin esperar a que concluya el periodo de consulta del expediente, de al menos 30 días- y que busque unificar esfuerzos. "Si no se resuelve este tema", resumió Morales, el expediente "no tiene sentido".

Ferry's atraviesa una crisis desde hace más de una década cuyo penúltimo capítulo fue la presentación en marzo del proceso concursal, y tras él un plan de viabilidad que incluye una fuerte deslocalización productiva y que ha colmado la paciencia del Consell. El IVF (Instituto Valenciano de Finanzas), avalista, apostaría por que los actuales propietarios dejen la gestión a la consultora madrileña Unilco (la que reflotó Kelme). "Nuestro problema no es quién gestiona la empresa, es que haya empresa, futuro y que se mantenga el mayor empleo posible", comentó ayer Vicente Rodríguez.

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