Crónica:ESCENARIOS

Pionero del 'acid jazz'

Millencolin y The Toy Dolls muestran sus visiones del 'punk rock' - Nueva entrega de los Conciertos en Familia de la BOS

Una de las teorías más extendidas sobre el origen del término acid jazz apunta que fue acuñado por un periodista británico para referirse a la música del James Taylor Quartet. Dos décadas después de su formación, la propuesta del conjunto comandado por el teclista británico James Taylor se sigue ubicando en iguales coordenadas. Lo demuestra The oscillator, su último disco, nueva entrega de una propuesta bailable, entroncada con el funk, el soul y el jazz funk, empastada y agitada por el inconfundible sonido del órgano Hammond y presentada por los promotores d...

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Una de las teorías más extendidas sobre el origen del término acid jazz apunta que fue acuñado por un periodista británico para referirse a la música del James Taylor Quartet. Dos décadas después de su formación, la propuesta del conjunto comandado por el teclista británico James Taylor se sigue ubicando en iguales coordenadas. Lo demuestra The oscillator, su último disco, nueva entrega de una propuesta bailable, entroncada con el funk, el soul y el jazz funk, empastada y agitada por el inconfundible sonido del órgano Hammond y presentada por los promotores de su actual gira, que recala hoy en Villava y mañana en Bilbao, como "cruce entre el dance del acid house y el groove del jazz".

Navarra y la capital vizcaína sirven también escalas para el Our last tour?, nombre con el que The Toy Dolls recorren Europa presentando Our last record? (Secret Records), álbum que pretende perpetuar el espíritu lúdico, irreverente y alborotador con que irrumpió el movimiento punki en los setenta. El trío inglés insiste en una suerte de punk rock acelerado, fácil de corear y trufado de guiños humorísticos. El cantante, guitarrista y compositor Michael Algar, Olga, es el único superviviente de la formación original, que surgió en la escena de Sunderland en octubre de 1979.

Millencolin acerca a Bergara una visión menos gamberra, más contundente y nítidamente melódica del punk rock. De hecho, el de punk rock melódico, o hardcore melódico sigue siendo la mejor referencia para hablar de discos como Kingwood (Burning Heart-Pias), una grabación que también se aproxima al street punk y vuelve a evidenciar la deuda del cuarteto sueco con Bad Religion y otros colegas californianos admirados por los skaters.

Las melodías presiden también Let them drink (Houston Party Records), tercer álbum del cuarteto estadounidense The Capitol Years, bien surtido de pop sustentado en armonías vocales, en la tradición comenzada por The Beatles y The Beach Boys, pop rock, conexiones con el folk rock y garage.

El ciclo Musiketan continuará el domingo con la actuación en el Euskalduna de Emily Slade, cantautora inglesa que empuña guitarra acústica y se sirve de sonidos folk.

Dentro de sus Conciertos de Familia de esta temporada, la Orquesta Sinfónica de Bilbao (BOS) presenta mañana Pulcinella. Bajo ese título, la Sinfónica, dirigida por su titular, Juanjo Mena, propone a los niños de entre cinco y once años un recorrido por el Nápoles del siglo XVII, amenizado por la música de Stravinsky y un cuento de Fernando Palacios narrado por Belén Otxotorena, y protagonizado por dicho personaje de la Commedia dell'Arte. La BOS ofrecerá esta vez dos pases: uno, como en conciertos anteriores, sólo para escuelas de música y otro posterior para todo el público.

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Getxo retomará su compromiso de homenajear anualmente al jazzista Pío Lindegaard. Lo hará con un concierto del Joachim Kühn Poison Trio, formación que comanda el pianista alemán Joachim Kühn, músico vinculado a la vanguardia del jazz, y completan el contrabajista argelino Jean Paul Celea y el batería vienés Wolfang Reisinger.

Tras representarse en el Teatro Principal de Vitoria y antes de recalar en el Kursaal donostiarra (3 y 4 de mayo), el espectáculo The best of Momix se puede contemplar hasta el domingo en el Arriaga. El montaje presenta, como su nombre indica, un resumen de las mejores coreografías creadas los últimos 25 años por Moses Pendleton para la compañía estadounidense de danza.

Finalmente, La Fundición acoge el estreno en Euskadi de Dress-Code, de la compañía catalana Erre Que Erre. Sus coreografías, ideadas e interpretadas por Guillermo Weickert y Mario G. Sáez, pretenden señalar la superficialidad de una sociedad que nos aboca al individualismo, prácticamente a la soledad, y en la que muchas personas recurren a signos externos y conductas consumistas y fetichistas para fabricarse una identidad.

The Toy Dolls. Sala Noboo de Tudela. Mañana, 23.00, con Ketesnuko. (20 euros). Sala Santana 27 de Bilbao. Domingo, 20.30. (22 euros; 20 anticipada).

Millencolin y Streetdogs. Sala Jam de Bergara. Hoy, 21.00. (25 euros).The Capitol Years y Zodiacs. Kafe Antzokia de Bilbao. Hoy, 21.30. (10 euros).

Emily Slade. Palacio Euskalduna. Domingo, 20.30. (10 euros).

Orquesta Sinfónica de Bilbao. Pulcinella. Euskalduna. Mañana, 12.30. (4 euros).

Joachim Kühn Poison Trio. Escuela de Música Andrés Isasi de Las Arenas. Mañana, 20.00. (8,50 euros).

Momix. Teatro Arriaga de Bilbao. Hoy y mañana, 20.00. Domingo, 19.00. (7,20 a 30 euros).

Dress-Code. De Erre Que Erre. La Fundición de Bilbao. Mañana y domingo, 20.30. (9 euros).

Orquesta Sinfónica Nacional de Tatarstán. Euskalduna. Domingo, 20.00. (24 a 39 euros).

The James Taylor Quartet. Sala Tótem de Villava. Hoy, 20.30, con The Foralettes. Kafe Antzokia de Bilbao. Mañana, 22.00. (20 euros; 18 anticipada).

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