Un plan para 16 poblaciones

Las obras de restitución del barranco del Poyo y otras ramblas que se incorporan al mismo en su cuenca afectan a 16 ayuntamientos -Alaquàs, Aldaia, Catarroja, Cheste, Xirivella, Chiva, Godelleta, Massanassa, Paiporta, Picanya, Riba-roja, Torrent, Quart de Poblet, Loriguilla, Mislata y Valencia-, a los que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) presentó en julio del año pasado una propuesta para lograr la "defensa integral contra avenidas" de toda la zona, tras la actuación de la primera fase entre Paiporta y L'Albufera.

El proyecto aún está en proceso de revisión, y su ejecución ...

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Las obras de restitución del barranco del Poyo y otras ramblas que se incorporan al mismo en su cuenca afectan a 16 ayuntamientos -Alaquàs, Aldaia, Catarroja, Cheste, Xirivella, Chiva, Godelleta, Massanassa, Paiporta, Picanya, Riba-roja, Torrent, Quart de Poblet, Loriguilla, Mislata y Valencia-, a los que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) presentó en julio del año pasado una propuesta para lograr la "defensa integral contra avenidas" de toda la zona, tras la actuación de la primera fase entre Paiporta y L'Albufera.

El proyecto aún está en proceso de revisión, y su ejecución se espera con ansia en localidades como Aldaia, que desde hace años insiste ante todas las administraciones implicadas en la necesidad de desviar el barranco de La Saleta para acabar con el riesgo de inundación en la población y polígonos industriales de Alaquàs, Quart de Poblet y Xirivella.

El plan presentado el año pasado preveía una presa en el municipio de Cheste para regular los caudales de la cuenca alta del Poyo y del Pozalet. En este último barranco también se anunció una intervención en su cruce con el by pass para evitar la inundación del polígono industrial El Oliveral (Riba-roja) con un corredor verde y un parque que actuaría como "laguna de acumulación en caso de avenida". Para el barranco de La Saleta, que atraviesa Aldaia, se plantearon obras para captar los caudales antes de llegar a la población y desviarlos con un colector al nuevo cauce del Turia, en vez de a L'Albufera, como se pensó en un principio. En Aldaia, el barranco sólo recogería caudales pluviales de la población y aguas abajo se realizaría "una vía verde de nuevo trazado", según la propuesta avanzada en 2004. En la confluencia del barranco Gallego con el del Poyo se estudia delimitar un área de mayor riesgo de inundación "para su reserva como zona de laminación natural". Aguas abajo de la confluencia del barranco del Poyo con el de Horteta, y a su paso por Torrent y Picanya, el cauce está "perfectamente definido" y no existen problemas potenciales de inundación, según la CHJ.

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