Al menos 29 pasajeros mueren al estrellarse un avión en Siberia
Un avión Antonov-24 con 53 personas a bordo se estrelló ayer en la Comarca Autónoma de los Nenets (CAN), en el extremo norte de Rusia, dejando 29 víctimas mortales.
La nave trató de realizar un aterrizaje forzoso, pero se incendió debido a que un ala tocó tierra cuando le faltaban sólo unos cinco kilómetros para llegar a su destino, el aeródromo del poblado de Varandéi, en la costa del océano glacial Ártico. De los 24 supervivientes, 10 se encuentran en estado grave y han sido evacuados al hospital de Narián-Mara, capital de la CAN.
El Antonov-24, que había despegado por la maña...
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Un avión Antonov-24 con 53 personas a bordo se estrelló ayer en la Comarca Autónoma de los Nenets (CAN), en el extremo norte de Rusia, dejando 29 víctimas mortales.
La nave trató de realizar un aterrizaje forzoso, pero se incendió debido a que un ala tocó tierra cuando le faltaban sólo unos cinco kilómetros para llegar a su destino, el aeródromo del poblado de Varandéi, en la costa del océano glacial Ártico. De los 24 supervivientes, 10 se encuentran en estado grave y han sido evacuados al hospital de Narián-Mara, capital de la CAN.
El Antonov-24, que había despegado por la mañana de Ufá, llevaba una tripulación de siete personas. Prácticamente todos los pasajeros abordaron el avión en la ciudad de Perm. Se trataba de trabajadores de Narianmarneftegaz, una filial de la petrolera Lukoil, que iban a su turno en los yacimientos de la zona. Entre los supervivientes hay 19 pasajeros y cinco tripulantes.
El Antonov siniestrado, construido en 1972, pertenecía a las Aerolíneas Regionales, compañía con sede en la ciudad siberiana de Kémerovo, y había pasado su última reparación general en 2002. En 1997, otro An-24 se estrelló en el Cáucaso del Norte, causando la muerte a 50 personas.