Blázquez: "Atenerse todos a las consecuencias"

El nuevo presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, dijo ayer que los acuerdos firmados entre España y el Estado de la Santa Sede -uno en 1976 y cuatro en 1979-, no son un privilegio para la Iglesia católica, y expresó su confianza en que no se impugnen por el Gobierno socialista. "Confío en su buen sentido. Tendrían que atenerse todos a las consecuencias si se impugnaran", replicó secamente el obispo Blázquez, que ayer por la mañana concedió a la Cope, la emisora de los prelados, la primera entrevista como presidente de la CEE.

El presidente del Ejecutivo socialista, Jos...

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El nuevo presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, dijo ayer que los acuerdos firmados entre España y el Estado de la Santa Sede -uno en 1976 y cuatro en 1979-, no son un privilegio para la Iglesia católica, y expresó su confianza en que no se impugnen por el Gobierno socialista. "Confío en su buen sentido. Tendrían que atenerse todos a las consecuencias si se impugnaran", replicó secamente el obispo Blázquez, que ayer por la mañana concedió a la Cope, la emisora de los prelados, la primera entrevista como presidente de la CEE.

El presidente del Ejecutivo socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, ha reiterado que el PSOE no llevó en su programa electoral, ni él en su discurso de investidura como presidente, la denuncia de esos acuerdos bilaterales, pero numerosos dirigentes de su partido insisten de vez en cuando que esos acuerdos entre España y el Vaticano, herederos del concordato naciaonalcatólico de 1953, son inconstitucionales. Ayer mismo lo volvió a reiterar el ex presidente del Congreso de los Diputados y ponente constitucional socialista, el catedrático Gregorio Peces-Barba. En declaraciones a Antena 3 recogidas por Europa Press, Peces-Barba defendió la laicidad frente al laicismo, que define como ataque ideológico a la religión, y aseguró que, aunque esté "atado" al presidente Rodríguez Zapatero en razón de su cargo de comisionado y no puede contradecirle en su consideración sobre los Acuerdos con la Santa Sede, como docente estima que "está claro" que son inconstitucionales.

En cambio, el obispo Blázquez cree que los acuerdos que atan las relaciones entre los dos Estados se atienen a la realidad social de España, como en su día hizo la Constitución de 1978. "Estamos en un momento de cierta perturbación, de cierta confusión. Necesitamos serenidad y claridad todos y que la verdad la podamos decir con amabilidad", dijo también, en referencia a la polémica creada en torno a las campanadas de las iglesias de Madrid con motivo del primer aniversario de los atentados del 11 de marzo de 2004.

"Es legítimo y laudable que las campanas suenen, que no es a celebración, es a difunto. Es una polémica estéril, tenemos que respetarnos. Por qué no vamos a poder expresar desde la Iglesia, también a través de este gesto, nuestra condolencia y nuestro recuerdo, ¿por qué no se va a poder hacer?", se preguntó. Preguntado por la polémica sobre la asignatura de religión en la escuela pública, Blázquez reiteró que los padres tienen el derecho a elegir la educación que desean para sus hijos según sus convicciones. "Hay unos acuerdos entre la Santa Sede y el Estado español, y los tres millones largos de firmas [de católicos pidiendo que se mantenga esa asignatura] están diciendo tanto del sentimiento de la sociedad". "Afirmo y reitero que los padres tienen derecho a elegir el tipo de educación según sus convicciones y hay acuerdos entre la Santa Sede y el Gobierno".

Sobre el aborto y la eutanasia, Blázquez reiteró la doctrina de su Iglesia: "No se puede cortar el itinerario de la vida desde la concepción hasta la muerte, hay que respetarlo". Preguntado sobre el sistema de financiación de la jerarquía católica vía asignación tributaria, el presidente de la CEE sostuvo que el procedimiento actual "respeta los derechos de los ciudadanos".

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