Un gusano de 700 toneladas

La máquina que excavará los nuevos túneles del metro de Sevilla llegó esta semana a la ciudad después de un viaje transoceánico de 11 días que le ha traído en barco desde Canadá. La tuneladora llegó despiezada y esta misma semana comenzará a montarse en la zona de obras situada en el campo de la Feria, muy próxima a la estación de Blas Infante, que será por la que, a principios de noviembre, empezará a avanzar la máquina.

Una vez que se adentre en las tripas de la capital, tendrá que abrirse paso por debajo de las calles de la ciudad a lo largo de 5.000 metros, 2.500 metros de túnel par...

La máquina que excavará los nuevos túneles del metro de Sevilla llegó esta semana a la ciudad después de un viaje transoceánico de 11 días que le ha traído en barco desde Canadá. La tuneladora llegó despiezada y esta misma semana comenzará a montarse en la zona de obras situada en el campo de la Feria, muy próxima a la estación de Blas Infante, que será por la que, a principios de noviembre, empezará a avanzar la máquina.

Una vez que se adentre en las tripas de la capital, tendrá que abrirse paso por debajo de las calles de la ciudad a lo largo de 5.000 metros, 2.500 metros de túnel para cada sentido de circulación. La máquina, fabricada por la empresa canadiense Lovat Inc., es capaz de avanzar una media de 12 metros al día. Cuando los técnicos estén completamente familiarizados con su funcionamiento, podrá llegar a excavar 400 metros en un mes, por lo que necesitará un mínimo de 14 meses para recorrer los 5.000 metros que tiene por delante.

La tuneladora, bautizada como El Bicho, empezó a fabricarse el 22 de diciembre de 2003 y salió de la factoría de Toronto el pasado 5 de septiembre. Hasta el puerto de Sevilla viajó a bordo de un buque de 111 metros de eslora y dividida en 27 piezas de entre 22 y 72 toneladas de peso. Una vez montada, pesará alrededor de 700 toneladas.

El montaje se llevará a cabo en la estación del Parque de los Príncipes, que se empleará como pozo de ataque para las obras. Para montar las 27 piezas hará falta alrededor de mes y medio. En la zona de obras le espera ya el equipo que a partir de noviembre va recorrer con ella el subsuelo de la ciudad. Son alrededor de 20 personas que trabajarán las 24 horas del día dividos en tres turnos. La tuneladora sólo hará una parada técnica para recibir cuidados de mantenimiento al atravesar cada una de las estaciones previamente excavadas.

Las dimensiones de la máquina que atravesará Sevilla son apabullantes. El diámetro exterior, de 6,06 metros, equivale aproximadamente a un edificio de dos plantas. La tuneladora mide más o menos lo mismo que un autobús urbano, unos 10 metros, pero la máquina, además de excavar, elimina escombros y reviste con dóvelas las paredes del túnel por lo que el aparato que cruzará la ciudad es mucho más largo, alrededor de 95 metros, aproximadamente lo que separa a las porterías de un campo de fútbol. Toda esta distancia está cubierta con una cinta transportadora que lleva los escombros desde la cabecera hasta la parte de atrás de la máquina.

Los empresa Lovac Inc., líder mundial en el diseño y fabricación de máquinas de última generación para la construcción de todo tipo de túneles, ha creado la tuneladora en función a las especiales condiciones del húmedo subsuelo de Sevilla. Una de las causas principales de la interrupción de la obra del metro en los años ochenta fue el gran número de filtraciones de agua que registraban los túneles por lo que esta vez la máquina está preparada para ejercer la misma presión que el agua y evitar que ésta entre.

Desde Seattle hasta Singapore, las máquinas fabricadas por Lovat han excavado 1.200.000 metros de túnel en más de veinte países. Entre otros, las tuneladoras de esta empresa se han adentrado en el subsuelo de Lisboa, París, Washington y Madrid.