Un grupo islamista amenaza con asesinar a un periodista italiano secuestrado si Roma no retira a sus soldados
Enzo Baldoni, periodista y creativo publicitario italiano desaparecido el viernes en los alrededores de Nayaf, fue secuestrado por un grupo iraquí llamado Ejército Islámico, que ayer envió un vídeo a la televisión qatarí Al Yazira. Junto al vídeo, en el que se mostraba al periodista solo y sin heridas aparentes, se remitió la exigencia de que Italia anunciara la retirada de sus tropas de Irak en el plazo de 24 horas. "De lo contrario, será ejecutado", dijeron los secuestradores. El cadáver del chófer iraquí de Baldoni fue hallado en una cuneta el pasado sábado.
El Gobierno de Silvio Ber...
Enzo Baldoni, periodista y creativo publicitario italiano desaparecido el viernes en los alrededores de Nayaf, fue secuestrado por un grupo iraquí llamado Ejército Islámico, que ayer envió un vídeo a la televisión qatarí Al Yazira. Junto al vídeo, en el que se mostraba al periodista solo y sin heridas aparentes, se remitió la exigencia de que Italia anunciara la retirada de sus tropas de Irak en el plazo de 24 horas. "De lo contrario, será ejecutado", dijeron los secuestradores. El cadáver del chófer iraquí de Baldoni fue hallado en una cuneta el pasado sábado.
El Gobierno de Silvio Berlusconi respondió con una nota en la que prometía hacer todo lo posible por liberar a Baldoni, pero sin ceder al ultimátum: "Italia seguirá en Irak", señalaba el comunicado.
Baldoni, enviado especial de la pequeña revista Il Diario, pronunciaba unas palabras en la filmación: "Soy Enzo Baldoni, vengo de Italia, tengo 56 años, soy periodista, he venido para escribir un libro sobre la resistencia iraquí y colaboro como voluntario con la Cruz Roja". El secuestrado es, además de periodista, uno de los creativos publicitarios más prestigiosos de Italia.
Es la segunda vez que el Gobierno de Roma se ve sometido a un ultimátum por parte de grupos de la resistencia iraquí. Cuatro guardaespaldas italianos, de los cuales uno fue asesinado, permanecieron secuestrados durante semanas para presionar a Berlusconi hacia la retirada.
Los tres fueron finalmente liberados por tropas estadounidenses, gracias a la delación, al parecer, de un miembro del grupo secuestrador.