El nuevo récord del crudo amenaza la previsión de crecimiento de la economía española

El precio del petróleo continuó ayer la escalada y marcó otro récord. El barril de crudo brent, de referencia en Europa, se situó en 41,30 dólares empujado por el nuevo bloqueo de cuentas de la petrolera rusa Yukos. También hubo récord en el mercado de Nueva York, con 44,41 dólares. Según los especialistas, si los precios del crudo se mantienen en niveles récord en los próximos meses, el crecimiento de la economía se reducirá entre una y dos décimas sobre la previsión oficial, ya rebajada al 2,8% (desde el 3%) en julio. Las reservas de crudo de España, según datos oficiales, son de 108,...

El precio del petróleo continuó ayer la escalada y marcó otro récord. El barril de crudo brent, de referencia en Europa, se situó en 41,30 dólares empujado por el nuevo bloqueo de cuentas de la petrolera rusa Yukos. También hubo récord en el mercado de Nueva York, con 44,41 dólares. Según los especialistas, si los precios del crudo se mantienen en niveles récord en los próximos meses, el crecimiento de la economía se reducirá entre una y dos décimas sobre la previsión oficial, ya rebajada al 2,8% (desde el 3%) en julio. Las reservas de crudo de España, según datos oficiales, son de 108,8 días.

Pese a la espectacularidad de los precios diarios, todos los expertos consultados destacan que lo importante, en términos económicos, es el precio medio del barril durante un periodo de tiempo significativo. Y con esa salvedad, coinciden: si los precios medios superan los 35 dólares por barril durante meses, la economía española se verá afectada en su crecimiento entre una y dos décimas (cada décima supone unos 750 millones de euros).

Guillermo de la Dehesa, presidente del Centre for Economic Policy Research, estima que el crecimiento de la economía -beneficiada como el resto de los países de la zona euro por el tipo de cambio euro-dólar, que atenúa el impacto de las subidas- puede registrar entre "una décima y décima y media" de menor crecimiento si persiste la carestía. Aunque las economías industrializadas no afrontan, en su opinión, una crisis como la de los años setenta. Comparar las dos situaciones (año 1979 y año 2004), señala De la Dehesa, supondría que el precio del barril habría llegado hoy a 100 dólares.

Subidas relativas

Como De la Dehesa, David Taguas, del servicio de Estudios del BBVA, relativiza la trascendencia de las actuales subidas del crudo si se comparan con las registradas en crisis anteriores, donde los precios del barril en dólares subieron un 204% (año 1974), un 125% (año 1979) y un 67% (año 2000). "Ahora estamos en subidas de precio, en dólares, del 19,8% si se comparan los meses transcurridos del año 2004 con el mismo periodo del año 2003", explica Taguas, "pero los incrementos de precios, medidos en euros, sólo son del 8,6%".

El servicio de Estudios del BBVA, que apuesta por un crecimiento a final de año del 2,6%, dos décimas por debajo de la previsión oficial, considera que lo más peligroso de una situación caracterizada por el empobrecimiento relativo de los países importadores de crudo, caso de España, son los llamados "efectos de segunda ronda", entre ellos, el traslado a la negociación salarial de las subidas de precios.

Emilio Ontiveros, de Analistas Financieros Internacionales (AFI), también cree que el crecimiento será inferior al previsto oficialmente y se situará en torno al 2,6% al final de 2004, "en línea con la estimación realizada por el Banco de España para el segundo trimestre". Ontiveros destaca la "merma de renta disponible" y el "impacto sobre los precios" que puede tener la subida del crudo en un país como España, que se cuenta entre los más pobres en eficiencia energética de los países que forman parte de la OCDE.

También Juan Iranzo, director general del Instituto de Estudios Económicos (IEE), cree que las subidas afectarán al crecimiento. Iranzo, según Efe, rebaja la previsión de crecimiento este año en una décima, hasta el 2,7%, para un precio medio del barril a final de año de 35 dólares.

En este contexto, las organizaciones que agrupan a los sectores que más rápidamente pueden sufrir los efectos de la carestía del petróleo han empezado a alzar la voz para reclamar medidas que palíen la pérdida de renta. Así, la patronal de transportistas, Fenadismer, aseguró que, si no se adoptan medidas para suavizar la subida de los carburantes -promoción de un gasóleo profesional-, negociará con los cargadores una subida de los portes.

Sector agrario

Las organizaciones agrarias UPA y Asaja alertaron también sobre los efectos de las subidas en las rentas agrarias. UPA pide al Gobierno que negocie en Bruselas una disminución de los impuestos especiales que gravan los hidrocarburos mientras Asaja exige "medidas para compensar la subida del precio del gasóleo agrícola, que ya supera los 48 céntimos de euro por litro".

Desde el Ministerio de Agricultura, su secretario general, Fernando Moraleda, admitió que la subida del crudo ha pasado de coyuntural a estructural, por lo que tanto el Gobierno español como la UE tendrán que dar "algún tipo de respuesta". La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) también mostró su temor a que las petroleras aprovechen las subidas de precios, en plenas vacaciones, para hacer negocio con las gasolinas.

En Bruselas, informa Ricardo M. de Rituerto, Loyola de Palacio, comisaria de Energía, reiteró ayer su tesis sobre la imperiosa necesidad de que la UE establezca un sistema de reservas de seguridad, estratégica, que siga el modelo de la existente en Estados Unidos. España, según datos oficiales, tiene unas reservas equivalentes a 108,8 días de consumo.