No sólo inseguridad
Ante la polémica suscitada en el barrio con relación a la inseguridad ciudadana en la Parte Vieja y habiendose aludido repetidamente a los vecinos, sin que nos conste que éstos se hayan manifestado ante la opinión publica o las autoridades, esta Asociación IXO! quiere manifestar lo siguiente:
El motivo de la existencia de nuestra asociación es la lucha contra el ruido y la suciedad que se padecen en la Parte Vieja y el Ensanche y la, para nosotros, grave conculcación del derecho al descanso y a unas condiciones de vida dignas. Pero entre los promotores de estas recientes movilizaciones ...
Ante la polémica suscitada en el barrio con relación a la inseguridad ciudadana en la Parte Vieja y habiendose aludido repetidamente a los vecinos, sin que nos conste que éstos se hayan manifestado ante la opinión publica o las autoridades, esta Asociación IXO! quiere manifestar lo siguiente:
El motivo de la existencia de nuestra asociación es la lucha contra el ruido y la suciedad que se padecen en la Parte Vieja y el Ensanche y la, para nosotros, grave conculcación del derecho al descanso y a unas condiciones de vida dignas. Pero entre los promotores de estas recientes movilizaciones nada se ha considerado al respecto, como si el único problema del barrio fuera, de repente, el de la inseguridad ciudadana. Con relación a esa degradación de la calidad de vida, desde nuestra fundación en 1999 venimos denunciando la progresiva guetización, con la desmedida proliferación de establecimientos hosteleros y pensiones, con la dependencia total del barrio al sector del ocio, con lamentables episodios de enfrentamientos con la autoridad, incumplimientos de las normativas y el consiguiente abandono por parte de ésta, dejando en parte el barrio a su suerte. Como dice el refrán, de aquellos polvos, estos lodos.
En las esquinas de nuestras calles se trapichea, bien es cierto y sabido, como lo es que diariamente establecimientos hosteleros del barrio incumplen los horarios de la nueva normativa, conculcando el derecho al descanso de los vecinos, sometidos a niveles de ruido intolerables. Todos los fines de semana y más acusadamente en verano, se consumen bebidas alcohólicas en el exterior de los establecimientos hosteleros y se arrojan envases de plástico alli expedidos, se orina en paredes y portales, etc., conculcando el derecho a la higiene y al bienestar hasta puntos de dificil comprensión en pleno siglo XXI. Pero el único problema para los promotores de la movilización parece ser la inseguridad.