Crímenes contra las mujeres
Desde la Plataforma Andaluza de Apoyo al Lobby Europeo de Mujeres recogimos cientos de firmas a favor de la Ley Integral contra la violencia a las mujeres en el año 2001, teniendo que explicar desafortunadamente a más de una mujer por qué el escrito finalizaba diciendo "nosotras, las mujeres víctimas de violencia, exigimos una Ley Integral...". Todas y cada una de nosotras somos víctimas de la violencia que desde el patriarcado, machismo y sexismo padecemos por nacer mujer. Hoy nos reafirmamos en nuestra convicción. La violencia contra nosotras no es consecuencia de la marginalidad social o ri...
Desde la Plataforma Andaluza de Apoyo al Lobby Europeo de Mujeres recogimos cientos de firmas a favor de la Ley Integral contra la violencia a las mujeres en el año 2001, teniendo que explicar desafortunadamente a más de una mujer por qué el escrito finalizaba diciendo "nosotras, las mujeres víctimas de violencia, exigimos una Ley Integral...". Todas y cada una de nosotras somos víctimas de la violencia que desde el patriarcado, machismo y sexismo padecemos por nacer mujer. Hoy nos reafirmamos en nuestra convicción. La violencia contra nosotras no es consecuencia de la marginalidad social o riqueza, drogodependencias, enfermedades mentales o cualquier otro tipo de argumento que expresan algunos políticos, profesionales de la judicatura, salud, cuerpos policiales, religiones o ideologías.
En la violencia contra las mujeres más que implementar medidas desde los poderes para erradicarla se actúa de forma contraria perpetuando y normalizando el uso de los cuerpos de las mujeres para la satisfacción de los hombres con todo tipo de aberraciones, se perpetúa con las tradiciones y costumbres que demonizan a las mujeres que optan por tener otra opción sexual que no sea la heterosexual, se perpetúa con la feminización de la pobreza no poniendo fin a la dependencia económica con más del 50% de paro laboral en las mujeres que en los hombres y un 37% de salario menor a igual puesto de trabajo para las mujeres que para los hombres.
No se normalizará la ciudadanía de primera para las mujeres hasta que no seamos nombradas y visualizadas como seres individuales y de plenos derechos. El lenguaje es tan importante como que de lo que no se habla no existe, ya va siendo hora que existan las profesoras, tutoras, abogadas, médicas, albañilas, concejalas... y no sea un desprestigio para la profesión porque está feminizado el término.
Seguimos educando a nuestras hijas e hijos con valores de empoderamiento para ellos y de sumisión para ellas hasta el punto que socialmente el prestigio o valor social lo pone desde el sistema el hombre, todas y todos los que luchamos por los derechos de las mujeres conocemos qué significa cuando sólo a nosotras se nos pregunta hasta en un comercio de alquiler para video ¿es usted casada o soltera? Por lo que la escala de respeto según las creencias religiosas especialmente, va de viuda, casada, separada, no estando normalizada socialmente la figura de la madre sola.
Nuestra indignación va más allá de seguir manifestándonos en ayuntamientos o puertas de mujeres asesinadas. Señoras y señores políticos, iglesias todas, abran los ojos ante los crímenes contra las mujeres y cambien la educación patriarcal, costumbres, tradiciones y culturas por otras con valores que sean inflexibles ante los crímenes contra nosotras las mujeres aunque den menos votos, feligreses.