El alcalde pide 94 millones para comprar la empresa Calle M-30

La Junta de Gobierno autorizó ayer un gasto de 70 millones de euros para la adquisición de la totalidad de las acciones de la nueva sociedad municipal Madrid Calle 30, SA, la empresa creada por el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón para reformar, mantener y gestionar la vía. Con esos 70 millones se adquirirán 7.000 títulos nominativos de 10.000 euros cada uno, según informó en rueda de prensa el vicealcalde, Manuel Cobo. Para financiar este gasto, la Junta de Gobierno ya aprobó, el 29 de abril pasado, la contratación con Dexia Sabadell Banco Local de una operación de préstamo por 94 millones de e...

La Junta de Gobierno autorizó ayer un gasto de 70 millones de euros para la adquisición de la totalidad de las acciones de la nueva sociedad municipal Madrid Calle 30, SA, la empresa creada por el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón para reformar, mantener y gestionar la vía. Con esos 70 millones se adquirirán 7.000 títulos nominativos de 10.000 euros cada uno, según informó en rueda de prensa el vicealcalde, Manuel Cobo. Para financiar este gasto, la Junta de Gobierno ya aprobó, el 29 de abril pasado, la contratación con Dexia Sabadell Banco Local de una operación de préstamo por 94 millones de euros.

Tras informar de esos acuerdos, Cobo afirmó que "el proyecto es tan bueno, que quiere contar con el apoyo económico del Ministerio de Medio Ambiente y de la Confederación Hidrográfica del Tajo". Ambos organismos se han manifestado en contra de la decisión del gobierno de Ruiz-Gallardón de soterrar la M-30 sin someter el proyecto a la declaración de impacto ambiental. Ahora la Confederación Hidrográfica del Tajo tiene que autorizar las obras que afectan al río. Cobo señaló que la concejal de Urbanismo, Pilar Martínez, se ha reunido con la confederación y ésta "va a actuar con criterios técnicos".

Inés Sabanés, portavoz de IU, consideró un "sarcasmo" que el gobierno local, "tras saltarse la declaración de impacto ambiental quiera pedir dinero a Medio Ambiente". "Es una burla, el colmo del cinismo y una tomadura de pelo", exclama Sabanés.

"El coste de la M-30 supone endeudar para 35 años a los madrileños. Una decisión así va a impedir cualquier otro tipo de inversión y un claro recorte de los gastos sociales. No han querido tener en cuenta el sobrecoste del soterramiento de la M-30 y, ahora, deben estar asustados, pero nunca esperé de Gallardón la cara dura de pedir financiación a otras administraciones", concluye Sabanés.