El Parque de Cabecera supera la edificabilidad del plan general, según el PSPV
Las instalaciones del Parque de Cabecera de Valencia exceden la edificabilidad prevista en el plan general urbano, según denunció ayer el grupo municipal socialista. La Junta de Gobierno Local, que preside la alcaldesa, Rita Barberá, tiene previsto aprobar hoy los proyectos que aún no había entregado la concesionaria, la empresa Rain Forest, y que afectan al parque de atracciones y el aparcamiento subterráneo. El pasado enero, el equipo de gobierno ya aprobó el llamado Bioparque, que albergará a los animales del zoo de Viveros. El conjunto de las actuaciones alcanza un coste de 56 millones de ...
Las instalaciones del Parque de Cabecera de Valencia exceden la edificabilidad prevista en el plan general urbano, según denunció ayer el grupo municipal socialista. La Junta de Gobierno Local, que preside la alcaldesa, Rita Barberá, tiene previsto aprobar hoy los proyectos que aún no había entregado la concesionaria, la empresa Rain Forest, y que afectan al parque de atracciones y el aparcamiento subterráneo. El pasado enero, el equipo de gobierno ya aprobó el llamado Bioparque, que albergará a los animales del zoo de Viveros. El conjunto de las actuaciones alcanza un coste de 56 millones de euros y deja sin definir dos áreas de terreno que en un futuro pueden destinarse a la ampliación del Bioparque o al Museo de la FIFA.
El Parque de Cabecera ocupa, incluida la zona municipal del mirador y un lago artificial, 320.000 metros cuadrados. El grupo socialista recuerda que el plan general destinó esos terrenos a zona verde con una edificabilidad de 0,1 metros cuadrados de techo. Rain Forest excede la edificabilidad permitida hasta alcanzar 36.000 metros cuadrados frente a los 15.000 que le corresponden, según los socialistas. A esa edificabilidad se suma, además, la permitida bajo la cota cero, todo ello sin informes de Urbanismo. La concejal Carmina del Río, además, criticó que Rain Forest ha introducido una zona comercial en la entrada del complejo, un negocio no previsto, y ha desvirtuado el proyecto del zoológico y la fundación Ignacio Docavo -la sede estará en Viveros-, y ofrece un parque de atracciones basado en juegos y entretenimientos acuáticos.
Rain Forest ha pedido modificar un colector y la factura ahora subirá a 1,7 millones de euros, denunciaron Del Río y la concejal de EU María Victoria González, que incidió en el uso de recursos de agua aún no autorizados.