El jefe de los Mossos cree que hubo detenciones para cobrar asistencia a juicio

El jefe de los Mossos d'Esquadra ha denunciado ante el Área de Asuntos Internos de la Dirección General de Seguridad Ciudadana que medio centenar de agentes han practicado en el último año detenciones excesivas por los delitos de resistencia, atentado o desobediencia a agentes de la autoridad para luego cobrar la asistencia a juicios. Una circular del major Joan Unió, el cargo de mayor graduación del cuerpo policial catalán, señala que "un total de 67 agentes efectuaron cinco o más detenciones" por estos delitos entre abril y diciembre de 2003.

La Subdirección General de la Polic...

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El jefe de los Mossos d'Esquadra ha denunciado ante el Área de Asuntos Internos de la Dirección General de Seguridad Ciudadana que medio centenar de agentes han practicado en el último año detenciones excesivas por los delitos de resistencia, atentado o desobediencia a agentes de la autoridad para luego cobrar la asistencia a juicios. Una circular del major Joan Unió, el cargo de mayor graduación del cuerpo policial catalán, señala que "un total de 67 agentes efectuaron cinco o más detenciones" por estos delitos entre abril y diciembre de 2003.

La Subdirección General de la Policía elaboró una auditoría sobre las asistencias retribuidas a juicios de los agentes que hubieran cobrado 10 horas o más por este concepto y descubrió que "38 de los 67 agentes que figuran en la lista de las detenciones también aparecen en la lista de efectivos que más horas han cobrado por asistencia a juicios".

Unió destaca el caso de un mosso que "practicó 12 detenciones por atentado, resistencia y desobediencia a agentes de la autoridad, que le han supuesto 53 horas retribuidas". El major insta a la División de Asuntos Internos para que lleve a cabo un seguimiento de esta situación, tras insistir en que, además de una praxis policial "no adecuada", podría haber una "relación directa" entre las detenciones y las horas que se retribuyen por asistencia a juicios.

Por su parte, el secretario general del sindicato CAT, Enric Alsina, denunció el "malestar" y la "alarma general" que ha creado este "seguimiento" en el cuerpo policial y recordó que "no es la primera vez que se practica una caza de brujas" en el colectivo. Alsina pidió a la consejera de Interior, Montserrat Tura, la destitución de Unió y de sus "inmediatos subordinados", a los que considera "responsables directos de muchos agravios" a miembros del colectivo. Alsina dijo que si se abren más de medio centenar de expedientes disciplinarios o informaciones reservadas, "los sindicatos reaccionarán" y se creará una situación de "inestabilidad" o enfrentamiento con el nuevo Gobierno de la Generalitat.

En la misma línea se expresó Albert Fabregat, de CC OO, quien calificó de "tontería" la denuncia del major, y aseguró que responde "a una política de restricción de presupuesto". No obstante, Fabregat pidió que si se ha observado esta actividad irregular en el cuerpo, "se actúe y se ponga en conocimiento de la autoridad judicial" al considerar que se trata de un "asunto muy delicado porque estaríamos hablando de detenciones ilegales".

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