Una nueva ola de atentados deja siete muertos civiles en Irak

Dos nuevos atentados acabaron ayer con la vida de siete civiles iraquíes después de que la noche anterior un coche bomba sembrara el pánico en el centro de Bagdad. Los portavoces militares estadounidenses revisaron a la baja el número de muertos en ese ataque. No fueron 28, sino siete, los fallecidos, entre ellos un ciudadano británico. La oleada de ataques se interpreta como un desafío a las fuerzas de ocupación cuando se cumple el primer aniversario de la guerra. También ayer, un cámara de la cadena de televisión árabe Al Arabiya resultó muerto y su compañero herido de gravedad en Bagdad por...

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Dos nuevos atentados acabaron ayer con la vida de siete civiles iraquíes después de que la noche anterior un coche bomba sembrara el pánico en el centro de Bagdad. Los portavoces militares estadounidenses revisaron a la baja el número de muertos en ese ataque. No fueron 28, sino siete, los fallecidos, entre ellos un ciudadano británico. La oleada de ataques se interpreta como un desafío a las fuerzas de ocupación cuando se cumple el primer aniversario de la guerra. También ayer, un cámara de la cadena de televisión árabe Al Arabiya resultó muerto y su compañero herido de gravedad en Bagdad por disparos de las tropas estadounidenses, según informó el citado canal.

Una explosión, al parecer causada por un coche bomba, dejó cuatro muertos y dos heridos en Basora, a 500 kilómetros al sur de Bagdad. Como el día anterior en la capital, el vehículo estalló frente a un hotel. El Mirbad solía ser utilizado por las fuerzas británicas para sus conferencias de prensa y estaba considerado uno de los más seguros de Basora. Esta ciudad y toda la región sureste, que patrullan los británicos, se ha mantenido hasta ahora relativamente libre de ataques. "Tenemos el consentimiento de la población", explicaba a este diario el portavoz militar británico, Tim Smith, durante una reciente visita a esa zona.

El otro ataque sucedió por la mañana en Baquba, 50 kilómetros al norte de Bagdad. Varios desconocidos abrieron fuego contra un autobús. Tres de sus ocupantes resultaron muertos y 10 heridos. Los fallecidos eran empleados de la televisión local que financia EE UU. Por otro lado, se produjeron anoche en Bagdad varios ataques con lanzagranadas contra dos hoteles ocupados por occidentales y contra el cuartel general de la coalición, informa France Presse.

Tanto el Consejo de Gobierno como el administrador civil estadounidense, Paul Bremer, emitieron sendos comunicados de condena al atentado del miércoles, que atribuyen a militantes de Al Qaeda. "Este último ultraje se suma a los otros ataques terroristas contra civiles inocentes y desarmados en todo Irak, así como a las bombas de Madrid", aseguró Bremer.

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