Costa ultima un pacto con las compañías de móviles que les exima de la creación de 36.000 empleos

La comprensión del Ejecutivo con los problemas del sector no tiene límites. El ministro de Ciencia y Tecnología, Juan Costa, ultima un nuevo acuerdo para certificar una reducción general de los compromisos que tienen las empresas que ganaron los concursos.

Aunque el pacto afectará a todos los sectores, el aspecto más sustancial se refiere a los operadores de telefonía móvil que ganaron el concurso de UMTS. Tras obtener una rebaja de los avales, los operadores quieren que se les libere de los denominados compromisos colaterales de sus ofertas, es decir, de todo lo que no tenga que ver co...

La comprensión del Ejecutivo con los problemas del sector no tiene límites. El ministro de Ciencia y Tecnología, Juan Costa, ultima un nuevo acuerdo para certificar una reducción general de los compromisos que tienen las empresas que ganaron los concursos.

Aunque el pacto afectará a todos los sectores, el aspecto más sustancial se refiere a los operadores de telefonía móvil que ganaron el concurso de UMTS. Tras obtener una rebaja de los avales, los operadores quieren que se les libere de los denominados compromisos colaterales de sus ofertas, es decir, de todo lo que no tenga que ver con la prestación del servicio.

Entre ellos, el más importante es el del empleo. Los ganadores comprometieron en sus ofertas la creación de 36.300 puestos de trabajo directos en 10 años (más o menos el triple en indirectos), que, según fuentes de la negociación, dejarán ahora de ser una obligación si fructifican las negociaciones con Ciencia y Tecnología, que se encuentran muy avanzadas.

Tampoco tendrán que cumplir con compromisos como la creación de centros de I+D, la puesta en marcha de fondos de capital riesgo para empresas tecnológicas y otros proyectos sociales que, en su conjunto, suponían inversiones de más de 2.000 millones de euros. Las exigencias de cobertura también se aplazan.

La tolerancia del Gobierno español, que concedió las licencias por 500 millones de euros, contrasta con la rigidez de otros Ejecutivos europeos, como el alemán, que, pese a que ingresó más de 50.000 millones de euros por las licencias de UMTS, no ha atendido a ninguna de las peticiones de los ganadores. Entre ellos figura Telefónica Móviles, al que el Gobierno germano ha amenazado con quitarle la licencia si no cumple con sus compromisos.