PANTALLA INTERNACIONAL

Los elogios y los reproches marcan el Festival de Sundance

Un libro de Peter Biskind critica a Robert Redford y a Harvey Weinstein, sus artífices

El festival de cine de Sundance debería llamarse "independientes en la nieve". A Robert Redford, su fundador, siempre le hizo gracia la idea de sacar a los productores y distribuidores de la templada California y traerles a una remota estación de esquí en las montañas de Utah, el Estado fundado por los mormones, en pleno invierno, para ver películas que nunca hubieran realizado los grandes estudios. Pero desde hace 20 años todos acuden a la cita -son cada vez más numerosos-, siempre fieles, en lo que se ha convertido en el primer certamen de cine independiente de Estados Unidos, el lugar donde...

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El festival de cine de Sundance debería llamarse "independientes en la nieve". A Robert Redford, su fundador, siempre le hizo gracia la idea de sacar a los productores y distribuidores de la templada California y traerles a una remota estación de esquí en las montañas de Utah, el Estado fundado por los mormones, en pleno invierno, para ver películas que nunca hubieran realizado los grandes estudios. Pero desde hace 20 años todos acuden a la cita -son cada vez más numerosos-, siempre fieles, en lo que se ha convertido en el primer certamen de cine independiente de Estados Unidos, el lugar donde quien quiera ser algo en la industria del cine debe ver y ser visto.

El gran cotilleo de esta edición, que muy discretamente y sin fiestas ha celebrado su vigésimo cumpleaños, no es una película, sino un libro. Down and dirty pictures: Miramax, Sundance and the rise of independent film. Escrito por el periodista Peter Biskind, describe a Redford como un fantasma enigmático que siempre llega tarde, y a Harvey Weinstein, el jefe de la poderosa productora Miramax, como a un tirano esencialmente interesado por el dinero. Sobre lo último se ha escrito ya tanto que no es noticia.

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El libro denuncia sobre todo cómo Sundance (que toma su nombre del personaje que Redford interpretó en Dos hombres y un

destino) se ha ido desvirtuando con la fama y el negocio. Es cierto que el festival ha cambiado. Hace 10 años, sólo el mundillo independiente acudía a helarse el gorro en Utah. Ahora una de las compañías que utiliza el evento para anunciarse vende ropa interior de cachemira. "El festival se define a sí mismo", comentó el veterano actor durante la rueda de prensa de apertura. "Las películas que se han mostrado aquí y los directores que han venido siguen hablando de ello. Ésa es la verdad".

Sally Kellerman, Jerry Doyle, Anthony Rapp, Eddie Daniels y Dan Mirvish, actores y director de Open house, en Sundance.AP
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