Mas y Piqué critican al Gobierno de Maragall por incumplir la paridad

El presidente afirma que no habrá más confusión entre "partido y país"

El nuevo Gobierno catalán no tuvo ayer otro remedio que encajar en el Parlament las críticas de la oposición por haber incumplido las solemnes promesas sobre la paridad de sexos formuladas durante la campaña electoral. Tanto Artur Mas en nombre de Convergència i Unió (CiU) como Josep Piqué en el del PP tomaron este incumplimiento como ejemplo de las "incongruencias" que, a su juicio, cabe esperar de la actuación de Pasqual Maragall y su Gobierno.

Maragall presentó su Gobierno como "el primero sin confusión entre partido y país", en contraste con los presididos por Jordi Pujol, y anunció...

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El nuevo Gobierno catalán no tuvo ayer otro remedio que encajar en el Parlament las críticas de la oposición por haber incumplido las solemnes promesas sobre la paridad de sexos formuladas durante la campaña electoral. Tanto Artur Mas en nombre de Convergència i Unió (CiU) como Josep Piqué en el del PP tomaron este incumplimiento como ejemplo de las "incongruencias" que, a su juicio, cabe esperar de la actuación de Pasqual Maragall y su Gobierno.

Maragall presentó su Gobierno como "el primero sin confusión entre partido y país", en contraste con los presididos por Jordi Pujol, y anunció para "dentro de unos meses" la posible modificación a fondo del organigrama gubernamental, cuyo esquema básico, heredado de CiU, no ha sido modificado. Será un Gobierno, dijo, "sin extremismos y con estabilidad".

Fue el conseller en cap, Josep Lluís Carod Rovira, el encargado de asumir que "todos tenemos contradicciones" y reconocer el incumplimiento de la paridad de sexos, puesto que las mujeres representan sólo el 23% del nuevo Gobierno en vez del 40% prometido. "Eso no nos satisface", admitió.

Pero Artur Mas había insistido en que la izquierda ha incumplido también el compromiso de reducir el número de departamentos del Gobierno, que ha pasado de 13 a 16, "porque han de repartirse el poder". Con este tipo de críticas, sin embargo, Mas abrió el flanco a que le recordaran su pasado reciente, como hizo Carod a continuación. Aunque no sea un consuelo, afirmó, en los gobiernos de CiU había todavía menos paridad de sexos que en el actual. Y en el último no sólo se crearon departamentos a la medida de Unió Democràtica, sino también la figura del conseller en cap, para dar proyección electoral al propio Mas.

Carod se apuntó ya como la voz defensora del nuevo Gobierno y recurrió a su facilidad para la metáfora para recriminar a Mas que osara aventurar, como había hecho, que el tripartito dedicará todo su tiempo a "repartirse cargos". "¡Pero si ustedes parecen representantes de una ONG, de Cargos sin Fronteras!", exclamó. Y añadió: "Lo que hemos encontrado en esta primera semana es una enorme cantidad de cargos, asesores, responsables de planes, proyectos y programas que dan fe de su creatividad en esta materia".

Encuentro Saura-Piqué

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Aunque el PP presume de no fijarse cuotas de hombres y mujeres, Piqué también criticó el incumplimiento de la promesa de Maragall en esta materia. Su línea de ataque contra Maragall se basó, sin embargo, en criticarle que da demasiado peso político a Carod.

El tono "firme pero constructivo" de Piqué contrastó con la acidez de Mas. Y mucho más todavía con la agresividad mostrada por el portavoz del grupo parlamentario de CiU, Felip Puig. Además de mostarse "frustrado" por la intervención de Maragall, Puig habló de "desprecio" al Parlament y de "inacción", aseguró: "Vamos a peor" y retó al nuevo Gobierno a comparar las ratios de asesores del Gobierno de Pujol con las del Ayuntamiento y la Diputación de Barcelona. Lo que irritó más a los tres partidos de la mayoría, sin embargo, fue que Puig lamentara que ninguno de ellos hubiera felicitado todavía a Mas como "ganador de las elecciones".

Esto provocó que tanto Carod como Josep Huguet (ERC), Joan Boada (Iniciativa Verds-EUiA) y Miquel Iceta (PSC) se vieran obligados a una réplica contundente. Todos ellos recordaron a Puig que las elecciones autonómicas "no son presidencialistas, sino parlamentarias", y que el Parlament surge de la mayoría parlamentaria. Iceta fue muy contundente: "Ustedes no saben perder: gana quien tiene más votos, a ver si lo aprenden". Ramató así: "La prepotencia en el Gobierno es nefasta, pero en la oposición es patética".

A poner de manifiesto la pugna entre CiU y el PP para liderar la oposición contribuyó que fuera Piqué, y no Mas, quien tuviera ayer mismo el primer encuentro con el consejero de Relaciones Institucionales, Joan Saura, para hablar sobre la futura reforma del Estatuto y la financiación de la Generalitat. Aunque todo quedó para después de las elecciones de marzo.

Traspaso elegante, pero menos

Una semana después de haber tomado posesión, el conseller en cap, Josep Lluís Carod Rovira, dijo ayer que el traspaso de funciones del viejo al nuevo Gobierno ha sido "en general impecable". Pero Carod no dejó pasar la ocasión para afear a su antecesor, Artur Mas, la ausencia en el traspaso del departamento del que era titular.

Esa indeseada ausencia, ironizó Carod, ha provocado que el nuevo Gobierno haya debido comenzar con el "déficit" de los consejos que la experiencia de Mas hubiera podido aportar. Ha sido así, añadió, porque "ha habido responsables gubernamentales que han sido muy elegantes, otros que no lo han sido tanto y otros que no lo han sido".

Carod agradeció al líder del PP, Josep Piqué, la amabilidad que tuvo al felicitar al nuevo Gobierno por su entrada en funciones. Piqué reconoció que la expectativa de la inminente convocatoria de elecciones legislativas para el mes de marzo impedirá que el nuevo Ejecutivo catalán tenga los 100 días de gracia habituales en cada legislatura.

La felicitación de Piqué no le ahorró, sin embargo, que el portavoz del grupo de Iniciativa Verds-EUiA, Joan Boada, señalara la contradicción entre su cortés comportamiento en Cataluña y el del portavoz del Gobierno central, Eduardo Zaplana. "No tenía 100 segundos de vida y este Gobierno ya era atacado por el PP para sus fines electoralistas", le reprochó.

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