El Ayuntamiento de La Vila conocía la fecha del juicio al Atrium al que no acudió

El Ayuntamiento de La Vila Joiosa, en manos del PP con mayoría absoluta, tenía conocimiento de la fecha exacta de la celebración del juicio contra el promotor del hotel ilegal Atrium Beach por infracción urbanística, aunque llegado el día de la vista oral, el 19 de diciembre de 2002, no compareció. La iniciativa judicial contra la promotora del complejo hotelero, que se levanta en la cala de Finestrat, la activó el concejal de Urbanismo, Amadeo Sánchez Martínez, en junio de 2002 porque las obras carecían de licencia municipal. Ante la incomparecencia del denunciante, la juez tuvo que absolver ...

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El Ayuntamiento de La Vila Joiosa, en manos del PP con mayoría absoluta, tenía conocimiento de la fecha exacta de la celebración del juicio contra el promotor del hotel ilegal Atrium Beach por infracción urbanística, aunque llegado el día de la vista oral, el 19 de diciembre de 2002, no compareció. La iniciativa judicial contra la promotora del complejo hotelero, que se levanta en la cala de Finestrat, la activó el concejal de Urbanismo, Amadeo Sánchez Martínez, en junio de 2002 porque las obras carecían de licencia municipal. Ante la incomparecencia del denunciante, la juez tuvo que absolver a la promotora. Las obras del complejo continuaron hasta el 18 de septiembre, cuando fueron paralizadas por la Dirección General de Trabajo a raíz de dos accidentes que costaron la vida a tres trabajadores.

Según documentos oficiales, facilitados por el edil independiente, Pedro Lloret, diez días antes del juicio de faltas contra la promotora del Atrium Beach, el alcalde, José Miguel Llorca, dictó un decreto ordenando al edil de Urbanismo y a un técnico municipal la comparencia en el juzgado. Sin embargo, ningún representante oficial de la corporación -ni político, ni técnico ni jurídico- acudió. Paradójicamente, ese mismo día el alcalde dictó un decreto similar para asistir a un juicio, también activado por el Ayuntamiento, contra otro promotor por una obra sin licencia, que sí fue acatado.

Para el edil Lloret, estos documentos -los dos decretos del alcalde- engordan la sospecha de una supuesta "tolerancia" del Ayuntamiento con el promotor del ilegal complejo hotelero.

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