Análisis:Inversión | CONSULTORIO

Hipotecas y tipos

Respondiendo a las señales más positivas de la economía estadounidense, los tipos de interés han roto en los dos últimos meses la tendencia bajista descrita desde comienzos de año. Esta evolución ha supuesto un considerable repunte del tramo largo, pero también ha afectado significativamente a la principal referencia de los créditos hipotecarios. El euribor a 12 meses, después de marcar a mediados de junio un mínimo histórico en 1,93%, llegó recientemente a niveles cercanos al 2,4%, despertando la preocupación por la sensibilidad de los hogares a incrementos de los tipos de interés.
...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Respondiendo a las señales más positivas de la economía estadounidense, los tipos de interés han roto en los dos últimos meses la tendencia bajista descrita desde comienzos de año. Esta evolución ha supuesto un considerable repunte del tramo largo, pero también ha afectado significativamente a la principal referencia de los créditos hipotecarios. El euribor a 12 meses, después de marcar a mediados de junio un mínimo histórico en 1,93%, llegó recientemente a niveles cercanos al 2,4%, despertando la preocupación por la sensibilidad de los hogares a incrementos de los tipos de interés.

A este respecto, el Gobierno español aprobó antes del verano un real decreto que favorecía el cambio de hipotecas de tipo variable a fijo, mientras que el Reino Unido esgrimía, entre otros, su sesgo hipotecario al tipo variable como uno de los elementos determinantes para rechazar su incorporación a corto plazo a la Unión Monetaria.

El impacto que el reciente repunte de tipos de interés pudiera tener sobre la carga financiera de los hogares será reducido

Aun compartiendo esa preocupación por el excesivo peso de la modalidad variable en el mercado hipotecario español, consideramos reducido el impacto que el reciente repunte de tipos pudiera tener sobre la carga financiera de los hogares, que para el caso de un principal de 90.000 euros a 30 años estimamos habría sido de 25 euros mensuales. De cara al futuro, si a finales del próximo ejercicio nos situáramos en los niveles que en la actualidad descuenta el mercado (subida de un punto porcentual en el tipo oficial del BCE), para esas mismas condiciones, el incremento sobre la cuota sería de unos 30 euros adicionales. Sin embargo, consideramos que la curva ha sobrerreaccionado, ya que si bien esperamos que la recuperación se produzca en los próximos trimestres, ésta será todavía lenta, y por tanto con un impacto más limitado sobre los tipos de interés, lo que permitiría un ajuste más gradual de la carga financiera y unos riesgos más reducidos para la posición de liquidez y solvencia de los hogares españoles.

Ángel Berges y David Martínez son integrantes de Analistas Financieros Internacionales (Grupo Analistas).

Archivado En